Diez años después de su última presencia en la máxima categoría del balonmano femenino español, el Porriño consiguió ayer el ascenso tras imponerse al Castelldefells por 24-31. Las de Abel Estévez sufrieron durante la primera mitad, pero en la segunda consiguieron marcar el ritmo del encuentro y dejar atrás a un rival que, muy mermado físicamente, no pudo aguantar cuando las gallegas se decidieron a jugar rápido.

Comenzaron las gallegas algo atenazadas por los nervios y fueron incapaces de marcar el ritmo de partido que les convenía, viéndose arrastradas por el juego lento y parsimonioso de un Castelldefels que se sabía inferior en cuestiones físicas. Así las cosas, durante la primera mitad la igualdad fue la tónica dominante en el electrónico, llegándose al descanso con un ajustado 13-12.

En la segunda parte, sin embargo, las cosas cambiaron. El Porriño sabía que sus opciones pasaban por imprimir un alto ritmo al encuentro y poco a poco fueron haciéndose con el control y jugando como saben hacerlo. Así, en cuanto las gallegas apretaron el acelerador, el Castelldefels se quedó atrás. Un parcial de 1-5 hacía despegar definitivamente a las gallegas en el minuto 10 de esta segunda parte, yéndose de una diferencia de cinco goles que sería ya definitiva (15-20). Buena parte de la gesta se basó en el trabajo defensivo de todas las jugadoras y el gran papel en ataque de Estela Doiro, Sihen y Carla, jugadora del filial, que fue clave en esta fase de ascenso.

A partir de ahí el Porriño jugó a sus anchas, sin levantar nunca el pie del acelerador ante un rival que, aunque lo intentó, no consiguió ya volver a meterse en el partido.

Con la victoria, las gallegas consolidaban su segunda plaza, por detrás del Feve BM Gijón, y se convertían junto al conjunto asturiano, en nuevo equipo de División de Honor.

A la segunda fue la vencida. Tras la decepción de la temporada pasada, en la que el Porriño se quedó a las puertas del ascenso en la última jornada, las jugadoras dirigidas por Abel Estévez se desquitaron este fin de semana. Pero no fue nada fácil la gesta, que por momentos pareció imposible, como reconocen jugadoras como Ana, una de las capitanas, tras la derrota el viernes ante el Amposta, que dejaba a las porriñesas en una situación límite.

"Después del viernes, pensé que no había nada qué hacer. Tuvimos suerte con el resto de resultados, nos ilusionamos y aquí estamos", afirma.

En la misma línea se posicionó la directiva. El presidente del club, Fernando Godoy, destacó el carácter de las jugadoras mientras que el vicepresidente, Manuel Pereira, fue claro: "lo vimos negro".

Sin embargo, en ese momento, los astros se alinearon con el Porriño y en la jornada del sábado, las jugadoras sacaron su carácter y se impusieron con claridad al Lleida, lo que unido a la victoria del Kukullaga y del Gijón hacía que las gallegas dependiesen de sí mismas en la última jornada ante un Castelldefels que ya se había quedado sin opciones de ascenso. "Tuvimos suerte", reconoce Paula.

Aun así, las porriñesas no lo tuvieron nada fácil ante las catalanas, que se emplearon a fondo y por momentos complicaron la vida al Porriño, sobre todo en la primera mitad.

Pero ahí apareció el espíritu competitivo de estas chicas, que nunca se rinden, y sacaron adelante el choque.

"Se nos arregló el panorama y lo supimos aprovechar", confiesa Godoy. Era una oportunidad única y no fallaron. El premio era medirse con los mejores equipos de España, algo que no se podía dejar pasar.

Castelldefels 24

Hege, Berta, Dolores (3), Yael (2), Sara (1), Paula (3), Noelia, Ana, Mireia, Alba, Carla (2), Ivette (7), Carolina (2), Sandra (3).

BM Porriño 31

Claudia, Elena, Paula (3), Estela (8), Ana (4), Aloa (1), Carol, Alba, Vini (1), Jessica (2), Carla (6), Sihen (5), Marta (1), Lorena.

Marcador cada cinco minutos: 1-1; 3-3; 4-6; 8-8; 10-8; 13-12 (descanso); 14-15; 15-20; 16-23; 20-26; 21-29; 24-31 Árbitro: Óscar García y Alfredo Arcos (madrileños). Excluyeron a Yael, Ivette (2), Sandra; Carol, Vini. Roja directa a Carol (23´). Incidencias: Encuentro disputado en el pabellón municipal de Etxebarri ante unos 200 espectadores,de los que alrededor de una treintena llegaron desde Porriño.