El Teucro tuvo que tirar de oficio para lograr la victoria frente a un filial del Barcelona que atravesó fases en las que fue mejor que el cuadro local. Fue un encuentro en donde resultaron decisivos jugadores que habitualmente cuentan con pocos minutos como Borja Pedreira y Calderón, que tuvieron una excelente actuación, sobre todo, en lo que respecta a la faceta ofensiva.

En la primera mitad la igualdad fue la nota predominante. Los azulgranas apelaron a una defensa 4-2 que creó muchos problemas a los de Modesto Augusto para poder lanzar a portería, prueba de ellos es que en el minuto cinco el marcador señalaba empate a un tanto.

El Barcelona mandaba en el electrónico de uno o dos tantos tras hacer un parcial de 0-3, pero la respuesta teucrista no tardó en llegar y cuatro goles consecutivos de Calderón (2), Carlos García y Toño le situaron por delante hasta llegar al descanso. Los visitante acortaron diferencias sobre la bocina con un tanto de penalti muy protestado por los aficionados.

Los diez primeros minutos de la segunda mitad no depararon grandes cambios en el juego. Un toma y daca constante provocó que se llegase a ese minuto con mínima ventaja visitante (20-21), pero de nuevo los teucristas apelaron a su experiencia para hacer un parcial de 5-0 que parecía decisivo para sentenciar la contienda, sobre todo cuando en el minuto 54 es expulsado el capitán visitante Diéguez tras ser excluido por tercera vez por dos minutos.

Con 29-26, y con superioridad numérica, el Teucro pierde una magnífica ocasión de irse de cuatro goles, tras fallar dos lanzamientos consecutivos desde los seis metros, lo que aprovechó Adriá para reducir diferencias. Se llegó a los últimos cinco minutos con una mínima renta de dos goles, pero Carlos García sacó a relucir su velocidad para marcar tres tantos que mantenían la diferencia tras los logrados por Javier García y Saubich.

En los instantes finales el técnico ordenó una defensa mixta sobre Rafa Dasilva con la intención de buscar el empate, pero esa decisión la aprovechó Calderón para conseguir dos nuevos tantos ante el jolgorio de una afición teucrista que ayer se volcó con el equipo en los momentos importantes. Además de resaltar la actuación de los menos habituales, también hay que destacar la eficacia desde el punto de penalti, ya que se anotaron los seis que pitaron los colegiados.