Iván Ares se adjudicó ayer la decimoséptima edición del Rali do Cocido que concluyó con polémica debido a la neutralización del último tramo de la carrera correspondiente a la segunda pasada por Brántega. En ella, la valvulina que desprendía el Skoda Octavia WRC de Roberto Blach fue la causante de que los pilotos siguientes en tomar la salida se negasen a hacerlo, aunque según fuentes de la organización fue el comisario del tramo quién decidió neutralizarlo por el vertido del aceite sobre el asfalto. Tras la reunión de comisarios celebrada en el Pontiñas Haley, éstos decidieron darle el tiempo de Pedro Burgo, segundo clasificado de la carrera, al resto de participantes al entender que el del propio Blach era anómalo. El veredicto de los comisarios se prolongó hasta poco antes de la medianoche ante el malestar de los numerosos aficionados que aguardaban en las inmediaciones del parque cerrado situado en la gran superficie de la cabecera comarcal dezana. Al cierre de esta edición, la clasificación general oficiosa de la primera carrera de la temporada estaba encabezada por Ares, seguido de Pedro Burgo y, en tercera posición, Roberto Blach.

Sin embargo, el primer rally del Gallego de Asfalto de 2011 vivió una segunda jornada muy entretenida, que fue seguida por un numeroso público en las cunetas de los diferentes tramos. Ares hizo scratch en la primera pasada por Xirón seguido de Luis Penido y de Pedro Burgo, mientras José Miguel Martínez Barreiro, Bamarti, conseguía terminar séptimo a pesar de los evidentes problemas mecánicos de su Ford Escort WRC. Los malos presagios para el piloto de la Escudería Estradense se confirmaron poco antes de tomar la salida en la primera pasada por O Couto, donde la rotura del palier delantero hizo que el de Cuntis dijera adiós a la prueba dezana muy contrariado. En este tramo, el Ford Focus WRC de Burgo fue más rápido que Ares y Roberto Blach, que ya por entonces se encaramaba a la tercer posición de la clasificación provisional al volante de su Octavia.

Aciveiro volvió a mostrar a un Iván Ares más agresivo que sus competidores, mientras Burgo terminaba séptimo debido a los fallos en la suspensión de su montura. Blach y Penido fueron segundo y tercero en el tramo del cenobio forcaricense a más de siete segundos del coruñés. En la segunda pasada por Xirón Burgo fue el encargado de hacer scratch dejando a más de seis segundos a Ares y a más de 15 al tercero, Fernando Rico. El último tramo de la mañana correspondiente a la segunda pasada por O Couto volvió a tener a ser para Burgo seguido de Ares y Blach. De vuelta a Aciveiro, Ares retomó el mando de la carrera con un nuevo scratch, siendo Penido segundo y Blach tercero. Burgo volvió a tener problemas terminando la sección en cuarta posición.

Saborida y Brántega fueron dos tramos disputados a cara de perro por los dos aspirantes a la victoria. Burgo se impuso en la primera pasada por Brántega y, también, en la primera de Saborida. Ares hizo scratch en la segunda pasada por Saborida por delante de Burgo poco antes del incidente del último tramo de la carrera lalinense.

Heridos y quejas vecinales

Por otra parte, dos jóvenes espectadores del Rali do Cocido resultaron heridos en el transcurso de la carrera. El primero de ellos, vecino de León, sufrió la fractura de un brazo cuando viajaba en un BMW con las placas LE-4938-U como acompañante en la carretera que une Lalín con Brántega para asistir a uno los tramos de la carrera. Poco después de las 21.15 horas, otro joven que presenciaba la prueba en el tramo de Saborida perdía varios dedos de una mano tras estallarle un petardo. El herido fue evacuado del lugar por una ambulancia medicalizada del 061.

Por último, varios vecinos de la parroquia lalinense de Vilatuxe se quejaron ayer a esta redacción de los inconvenientes que, según ellos, sufrieron durante la celebración del rally. En concreto, el malestar vecinal se centró en la imposibilidad de mover los vehículos particulares de los habitantes del lugar en el transcurso de la competición.