Frigoríficos 32

Santana; Serafín (1), Karleusa (2), Suso Soliño (9,4p), Eijo (2), Pablo (5) y Adrián (2) –siete inicial–Kevin (ps), Lasica (2), Rubén (2), Espino (5), David García (1) y Ugalde (1).

U. León Ademar 28

Melián; Cabanas (3), Ugarte (6), Jaime González (2), Nantes (4), Carrillo (2) y Castro (5,2p) –siete inicial– De Vega (ps), Mellado, Beltza (2) , Mario, Jadin (4) y Richi.

Marcador cada cinco minutos: 2-4; 4-5; 6-8; 10-12; 13-15; 16-16 (descanso); 17-17; 20-20; 22-21; 26-24; 29-26; 32-28. Árbitros: Bohigas Estela y Castañer Girbes (Valencia). Excesivamente meticulosos en algunas acciones. Excluyeron a los locales Adrián, Karleusa y Ugalde y a los visitantes Jaime González, Mellado y Beltza. Incidencias: Unos 500 espectadores en el pabellón de O Gatañal.

El Frigoríficos del Morrazo prolonga su extraordinario momento de juego. Ayer volvió a dar una exhibición de balonmano, pero sobre todo de fe y ambición, para solventar un complicadísimo encuentro ante el Universidad de León Ademar. Los de Pillo debieron esperar hasta el cuarto final del duelo para decantarlo a su favor.

Sangre, sudor y lágrimas era lo que esperaba el Cangas en su enfrentamiento ante el conjunto castellano y eso fue lo que se encontró desde el primer momento. Los de Guillermo Fernández ya no son el equipo blandito de la primera vuelta y se han convertido en un conjunto sólido que sabe aprovbechar perfectamente la calidad de sus integrantes, muchos de ellos en las selecciones inferiores.

El arranque del choque ya dio buenas pistas de lo que sería el partido. El 5.1 visitante se le atragantaba a un Cangas que no encontraba los huecos, y cuando lo hacía se topaba con el gran comienzo de Melián bajo palos. Pero el principal problema cangués estaba en la defensa. El 6.0 era incapaz de frenar las oleadas de un Universidad de León que explotaba a la perfección la conexión con el pivote Ugarte.

Pillo buscó más dinamismo con la entrada de Nelson Espino. Y el canario le dio una continuidad al juego local del que había carecido hasta entonces. Soliño se aprovechaba de ello y engrosaba su cuenta particular pero el Frigoríficos tuvo que esperar hasta el último minuto y medio de este periodo para conseguir poner las tablas.

En la reanudación Soliño, desde los siete metros, ponía a los suyos por delante por vez primera en el choque (17-16). La precipitación y de nuevo Melián impedían mantener la inercia, y Ugarte devolvía la ventaja a los suyos (17-18).

Pero este Cangas nunca pierde la fe. Con Ugalde como avanzado, la defensa 5.1 puso en más aprietos a los de Guillermo Fernández. La igualdad era máxima. Y Pillo se la jugó. Sentó a David García, valiente en sus penetraciones, pero desafortunadísimo en el lanzamiento, y puso en pista a Rubén Soliño. En apenas tres minutos el Frigoríficos marcaba distancias (24-21). Fue el principio de la victoria. El Cangas estaba lanzado y sentenció el marcador por medio de Rubén.