El Pilotes cambia su residencia habitual para recibir al colista de la competición, el Ingenieros Almoradí. Los hombres de Quique Domínguez dejan As Travesas, donde se celebra una competición de patinaje, para irse a jugar al pabellón de Navia, algo que no inquieta al técnico vigués. "Ya habíamos entrenado varias veces, es una buena pista y no nos tiene por qué afectar. Al tener un aforo más reducido incluso se puede crear más ambiente y puede ser positivo", comenta.

El conjunto académico llega al duelo ante el conjunto alicantino en un gran momento de forma, en busca de la sexta victoria consecutiva que le permita mantenerse firme en la pelea con el Obearagón Huesca por la única plaza de ascenso directo a la Liga Asobal. Todo lo que no sea ganar sería un duro revés para los vigueses, que en las próximas cinco jornadas se tendrán que medir con tres de los cinco primeros clasificados, incluidos los dos derbis.

Volverá a ser de la partida el central Rubén Montávez, que regresó a las pistas tras su lesión la pasada semana ante el Bidasoa y que poco a poco va olvidando sus problemas físicos. "Está mejor, ha entrenado muy bien y con los problemas que estamos teniendo en esa posición es importante que vaya entrando, que pierda el miedo. Lo necesitamos para todo lo que viene", afirma el entrenador académico.

Sin embargo, no todo son buenas noticias para Quique Domínguez, que una semana más volverá a contar con las ausencias de Pablo Macías y Juanjo Ruesga, a las que suma el central Fran González, que terminó el duelo del pasado sábado en Irún con molestias en su hombro derecho. Además, el lateral lituano Tautvydas Mikalauskas es duda por molestias en sus abductores, una circunstancia que le ha impedido entrenar con regularidad durante la semana.

A pesar de la nefasta clasificación del Almoradí, que sólo ha sumado dos puntos en lo que va de campaña, Domínguez no quiere relajación en sus jugadores, sabe que los partidos no se ganan con el nombre y está convencido de que tendrán que realizar un encuentro muy serio para que no salte la sorpresa.

"Las bajas que tenemos hacen que perdamos algo de nivel y las cosas se igualen, somos un poco más débiles. Por eso tenemos que hacer un partido muy serio y estar muy sólidos en defensa para sacar el encuentro adelante", dice el técnico vigués.

Sobre el rival de esta tarde, Quique Domínguez opina que "es un equipo que juega bien en ataque,a pesar de las limitaciones lógicas por los números que presenta en la clasificación, tiene un dos contra dos muy bueno y un pivote muy móvil que dificulta la defensa".

El conjunto vigués tendrá un ojo puesto en lo que puedan hacer sus rivales directos por el ascenso a la liga Asobal. El Obearagón Huesca recibe en su cancha al Anaitasuna, quinto clasificado y próximo rival de los académicos, mientras que el Frigoríficos del Morrazo, con la ausencia del francés Tihemir Doder, visita Santander para medirse al Adelma Sinfín, encuentro en el que los cangueses necesitan la victoria para no perder comba con el dúo de cabeza. El Teucro, por su parte, jugará mañana en Badajoz.

Estadio: Pabellón de Navia. Hora: 18.00 (hoy). Árbitro: Susana Reoyo Zamora y Keiko Clara Takeuchi Torres.