Comienza este fin de semana la Semana Caixanova del Atlántico-Gran Premio Iberdrola, fiesta grande de la vela ligera gallega y mundial. El evento es heredero desde el año 2000 del Trofeo Martín Barreiro, creado en los años setenta, pero agigantado en sus dimensiones. La Semana, de hecho, está entrecomillada porque abarca los próximos cuatro fines de semana e irá "in crescendo", de lo modesto a la elite. Serán más de mil las embarcaciones que compitan en la Ría de Vigo.

El Náutico organiza la Semana junto a Triente. En su salón se presenta el programa de actividades. Acuden autoridades y patrocinadores, como en los tiempos boyantes. La prueba parece ser de lo poco inmune a la coyuntura económica. "Pese al difícil momento de crisis, hemos conseguido mantener el nivel y la categoría", destaca el presidente del club vigués, Franco Cobas, que entiende que la Semana "está consolidada como el gran evento del panorama ibérico de la vela ligera". A su juicio, el Náutico cumple de esta forma uno de sus grandes cometidos, que es "servir de puente entre los jóvenes vigueses y el mar".

Aunque la Semana se sale de los límites locales. Los participantes proceden de toda España y otros quince países. A la European Laser Cup, por ejemplo, acuden los equipos nacionales de Suiza, Hungría, Italia, Francia, Bélgica, Suecia, Finlandia y Portugal y de todas las comunidades autónomas de litoral. El local Álvaro Franco competirá en esta cita concreta contra los mejores especialistas.

Habrá también campeonatos de Galicia (es puntuable la Regata Caixanova para solitarios y a dos) y singladuras para todo tipo de clases de la vela ligera hasta la traca final que es el Meeting Internacional Pescanova de Optimist. Esa última semana está dedicada a los más pequeños (entre 10 y 15 años), con un curso impartido por entrenadores de elite dirigidos por Pedro Quiroga.

El Optimist es el primer paso de las estrellas del futuro, una embarcación a la que la comunidad internacional de este deporte dedica mucha atención. Y la Semana Caixanova es la cita más importante de todo el planeta junto a la que se realiza en el Lago di Garda italiano.

El prestigio de la organización viguesa se demuestra en la cantidad de peticiones que han tenido que descartar. La Federación Internacional les permite sólo 350 participantes por cuestiones de seguridad. La Ría tiene sus limitaciones. Y la Semana Caixanova del Atlántico, su planificación presupuestaria bien definida. Por eso se han tenido que quedar fuera 236 de los 586 que habían solicitado tomar parte en ese Meeting Internacional Pescanova.

La Ría, en consecuencia, volverá a vestirse del blanco de las velas en esa fotografía que el Concello recoge en el libro que regala a sus homenajeados en las recepciones. "Y todos alucinan", dice el concejal de Deportes, Xabier Alonso.