La Unión Ciclista Internacional (UCI) ha hecho pública la suspensión temporal de la licencia de David García. El organismo internacional revela que el marinense dio positivo por EPO en el análisis de orina efectuado el 13 de septiembre, tras la disputa de la etapa de la Vuelta a España que concluyó en Cotobello. El corredor del Xacobeo tiene ahora varios días de plazo para solicitar el contraanálisis de la muestra. Si se confirma la presencia de la sustancia dopante, García será sancionado durante dos años aunque el castigo podría rebajarse si colabora en la resolución del caso.
La noticia del positivo por EPO de David García supone una salto brutal en el proceso de investigación que las autoridades deportivas habían abierto. La UCI, hasta el momento, se había limitado a confirmar el pasado jueves, varias horas después de que surgiese la noticia, que en los controles realizados a Ezequiel Mosquera y David García el 16 de septiembre había aparecido hidroxietil almidón. Este producto diurético está prohibida porque al aumentar la cantidad de orina puede ayudar a enmascarar el uso de sustancias dopantes. Era precisamente lo que ahora debía investigarse. La aparición de EPO en la muestra tomada tres días antes a David García acelera el proceso en su caso.
La hipótesis que se maneja ahora con mayor certeza es que David García empleó precisamente el almidón para camuflar la utilización de EPO. La eritropoyetina, instrumento principal del dopaje ciclista en la era, eleva el hematocrito (porcentaje ocupado por los glóbulos rojos en la sangre) y mejora la oxigenación.
David García conoció la noticia en Madrid. El marinense y Ezequiel Mosquera se encontraban desde hace varios días en la capital, diseñando su defensa, que obviamente el marinense tendrá que variar sustancialmente. Su camino se separa del de Mosquera. El teense sigue bajo investigación. Los indicios pueden empeorar las sospechas (en su orina apareció hidroxietil, como en el caso de García, que era además su compañero de habitación). Pero de momento sigue sin haber pruebas de que Ezequiel Mosquera se dopase. La UCI aún tiene dos semanas por delante para ofrecer nuevos datos, según los plazos que se suelen manejar.
Hay fuentes que indican que el hecho de que ayer sólo revelasen el positivo por EPO de García podría indicar que Mosquera es inocente de dopaje y que podrá salir de esta historia con una sanción menor (administrativa o de tres meses de suspensión como máximo) por consumo de una sustancia prohibida.
La situación sigue siendo muy confusa y de final abierto. El gerente del Xacobeo, Pedro Alfaro, y el agente de Mosquera, Juan Campos, mantenían al cierre de esta edición un encuentro con miembros de la Federación Española. En todo caso, David García sabe a qué se enfrenta. La utilización de EPO está catalogada como muy grave. Si se confirma su culpabilidad, la sanción es de dos años. Para un ciclista de 33 años como él, supone la conclusión abrupta de su carrera.
La UCI puede mostrarse flexible si García confiesa su culpa y proporciona detalles y nombres: quién le ayudó a doparse, quién le suministró las dosis de EPO... Ricco, en una situación semejante, redujo a un año su suspensión.
El jefe de los servicios médicos del Xacobeo, Elías Festa, mantiene que el dopaje, en caso de producirse, fue una decisión individual de García y no un sistema instalado en el equipo. "Estoy sorprendido. La situación es muy triste", declaraba ayer en la Radio Galega. Festa asegura que todos los ciclistas del Xacobeo se habían sometido a entre diez y quince controles tanto internos como de la UCI durante la temporada, antes de la Vuelta a España, y que los galenos que acompañaron a la escuadra durante la ronda le aseguran que el protocolo de seguridad se siguió a rajatabla.
Lo cierto es que el positivo de García complica aún más la creación de ese equipo gallego que los demás ciclistas pretendían poner en marcha. Sería una escuadra de categoría continental, con 12 corredores, un presupuesto de 600.000 euros y un calendario más humilde. Los ciclistas siguen en el empeño.
La Secretaría Xeral para o Deporte, por su parte, ha difundido un comunicado en el que "reitera" su "invariable postura contra el dopaje", si bien señala que debe ser respetada la presunción de inocencia de David García.
