El Celta empieza a encontrar el camino del gol, al menos en los partidos amistosos, como el celebrado ayer por la mañana en Balaídos, en el que derrotó al conjunto canadiense del Montreal Impact (2-1) gracias a la efectividad en el remate de sus dos fichajes de invierno: Dimitrios Papadopoulos y Gastón Cellerino. El ariete argentino se estrenó en este encuentro internacional como goleador del conjunto vigués, que necesita rematadores con urgencia para que le ayuden a remontar el vuelo en el campeonato de Liga.

Eusebio aprovechó este compromiso –que contó con trío arbitral colegiado – para celebrar la segunda sesión de entrenamiento de la semana. Para enfrentarse al equipo que juega en la segunda división estadounidense y que está realizando la pretemporada en Melgaço, el técnico céltico presentó dos alineaciones distintas, con la presencia de varios canteranos. La primera parte la afrontó con Falcón, Víctor, Ortega, Túñez, Roberto Lago, Jonathan Vila, Michu, Alex López, Aspas, Papadopoulos y Toni.

El delantero griego, que intercambió posiciones con Aspas, se movió con mayor asiduidad por la frontal, donde a los 25 minutos enganchó un buen centro desde la derecha del canterano Alex López para abrir el marcador con un fuerte derechazo.

Cinco minutos después, el conjunto canadiense aprovechaba un desbarajuste defensivo del Celta para sorprender a Falcón. Con un poco de orden táctico y con buen porte físico, los candienses le plantaron cara a los célticos.

Tras el descanso, Eusebio presentó un equipo totalmente renovado, con Yoel, Mallo, Noguerol, Catalá, Botelho, Bustos, Garai, Trashorras, Abalo, Cellerino y Danilo.

El Montreal Impact encontró entonces mayores dificultades para superar la línea de medios céltica, donde Bustos y Garai le dieron mayor fortaleza física al equipo; y Trashorras, más sentido al balón, que circuló mucho más por las bandas.

De una asistencia del centrocampista lucense se aprovechó Cellerino para ganarle por velocidad a su marcador y salvar la salida del guardameta con un lanzamiento ajustado al palo. El argentino se estrenó como goleador celeste. El primer balón que recibió en buenas condiciones cerca del área lo aprovechó el jugador cedido por el Livorno italiano, que ha demostrado que conoce el oficio de ariete y que posee recursos para el remate y para originar segundas jugadas.