La plantilla y cuerpo técnico del Kics Ciudad de Vigo se presentaron ayer ante los medios de comunicación para hablar de su situación personal. Fue una charla en la que no se habló de baloncesto y sí de lo mal que lo están pasando al "haber cobrado solamente uno de los cinco meses que llevamos trabajando en el club".

José Antonio Rojas, como capitán del equipo, explicaba que querían "poner en conocimiento de los aficionados y del público en general la situación que estamos viviendo. Llevamos cuatro meses de paciencia y esta ha tocado a su fin, y por eso queremos hacer pública nuestra situación". Lo que sí dejó claro el capitán vigués es que no van "ni a dejar de entrenarse ni a dejar de jugar. Todos sabemos lo que nos jugamos sobre el campo y no vamos de dejar de hacer nuestro trabajo, y lo único que pretendemos es que se conozca esto y que sirva para que se solucionen los problemas".

Manolo Povea, entrenador del equipo vigués, ahondaba más en el tema al explicar que "todo se debe a un problema entre el patrocinador y la directiva. Desde un momento ellos nos han pedido paciencia y tiempo ya que todo se iba a solucionar pidiendo unos plazos, pero nuestra vida está por encima de todo".

El técnico vigués quiso destacar el "profesionalismo de toda la plantilla, que por encima de los problemas personales ponen por delante al club y al equipo. En otro caso ya habrían arrojado la toalla, pero están entrenando por encima de lo exigible y lo que no podemos decir es que esta situación tiene algo que ver en los partidos que perdemos".

Lo que sí quisieron dejar claro los miembros de la plantilla y del cuerpo técnico, que la temporada pasada vivieron la misma experiencia, es que la situación no es la misma. "Cuando yo llegué al club", apuntó Povea, "me sentí totalmente identificado con el proyecto, con la ciudad y con el esfuerzo de las personas que siguen al frente de esto, arriesgando su patrimonio personal e incluso su salud. Lo que está claro es que yo mantengo mi confianza, ya que en caso contrario sería el primero en marcharme".

Sobre las posibles acciones a tomar en el caso de que se prolongue la situación, tanto Povea como Rojas dijeron no haberse "planteado nada", ya que confían en que "ahora que se ha hecho pública nuestra situación las cosas se solucionen lo antes posible". No obstante, Povea aclaró que "una huelga tampoco tendría demasiado sentido cuando la competición finaliza el mes que viene y nosotros lo que queremos es que se solucionen cuanto antes todos los problemas.

La directiva envía un mensaje de tranquilidad y pide paciencia

La directiva del Kics Ciudad de Vigo no ha tardado demasiado tiempo en salir a la luz pública tras la denuncia de impago de los jugadores de la plantilla. Ramón Lago, directivo del conjunto vigués, reconocía los problemas de "liquidez que en estos momentos estamos atravesando, y que vienen motivados por la situación que está viviendo el patrocinador, como otras muchas empresas en el país, y que provocan una delicada situación económica. Nosotros entendemos los problemas de la firma que nos patrocina, y esperamos resolver este contratiempo en poco tiempo. Estamos trabajando en ello y somos optimistas", indican tras el anuncio de la plantilla.

Desde el club se quiere enviar un mensaje de tranquilidad y se pide a todos un poco de paciencia para resolver una situación que puede quedar totalmente resuelta en muy poco tiempo.