El Barcelona inició su trayectoria copera, donde defiende título, con un triunfo plácido por 0-2 ante una Cultural que recuperó, después de más de medio siglo, el sabor de medirse al conjunto catalán, pero que se fue desinflando a medida que transcurría el encuentro.

Si en la temporada pasada el Benidorm, otro Segunda B, les plantó batalla, cediendo tan sólo por sendos resultados por la mínima, en el "Reino de León", Guardiola se permitió la licencia de dar descanso a sus estrellas sin pasar demasiados agobios.

Sólo hizo falta que el improvisado once de Guardiola empezara a engrasarse para que pusiera las ocasiones de peligro sobre el portal de Mikel Saizar.

El partido bajó sus grados, esperando los latigazos de calidad de unos y las ganas sin límite de otros que no le perdían la cara al encuentro y que tampoco pasaban por demasiados apuros porque alguno de los experimentos azulgranas no funcionaba en exceso, caso del canterano Jeffren, que estrenaba posición más retrasada de lo habitual.

Los blancos seguían mordiendo, cómodos en su 4-4-1-1, dejando en punta a su único goleador de la temporada, Jito, formado en la cantera azulgrana.

Esperaban los leoneses solventar el primer acto con su puerta inmaculada, pero la habilidad, y también la constancia, de Bojan, dejaba el balón en bandeja a Pedro que desatascaba el marcador con un disparo arriba, imparable para el portero. El gol azulgrana pareció dormir el choque, con una Cultural que se mantenía con su dibujo perfectamente definido e inalterable.

Guardiola agitó de nuevo su coctelera y buscó nuevos combinados, devolviendo a Jeffren a la naturalidad de su vocación ofensiva y aprovechando la versatilidad de Maxwell, para colocarle en la derecha y en la banda izquierda al galo Abidal.

Y así, en un caracoleo de Jeffen, el venezolano ganaba la espalda a toda la defensa rival, irrumpiendo el onnipresente Pedro para definir a la perfección y colocar el más tranquilizador, para los suyos, 0-2.

El técnico local Josu Uribe optó por buscar la frescura con un triple cambio, instantes antes de que Pedro a punto estuviera de sumar su tercera diana, recreándose después los azulgranas en el área rival.