El estadio Santo Domingo, que será ampliado para el día más especial de su historia, verá hecho realidad el sueño de un modesto del fútbol madrileño, el Alcorcón, que vivirá gracias a la Copa del Rey la oportunidad de medirse a un Real Madrid en el que Manuel Pellegrini dará descanso a titulares.

El ambicioso proyecto creado por Florentino Pérez no distingue de competiciones. Este año el Real Madrid va a por la Copa del Rey, con una plantilla más amplia, remodelada, con la que sueña con el triplete pese a un irregular inicio de temporada.

Lo sabe Pellegrini, centro de las críticas por la falta de estilo de juego, para quien el encuentro en Alcorcón cobra importancia, como ha trasladado a sus jugadores, recordando errores sonados del pasado. El último, ante un modesto como el Real Unión que la pasada campaña sacó los colores al Real Madrid en el Bernabéu.

La Copa del Rey es el único título que le falta por ganar a jugadores como Raúl y JGuti, que se acercan al final de su carrera. También hace especial ilusión a Iker Casillas, que como es habitual dejará su puesto al polaco Jerzey Dudek.

Sigue marcado por las lesiones el conjunto madridista y con pocas ganas de forzar a algunos jugadores que pueden recuperarse para el próximo partido de Liga, ante el Getafe, como es el caso de Higuaín.

Regresan, en cambio, Benzema y Ruud Van Nistelrooy, pero sigue ausente Cristiano Ronaldo, recuperándose de su lesión, y tampoco estará Pepe, por precaución tras sufrir un leve esguince de tobillo en Gijón.

La recuperación de Benzema y de Van Nistelrooy hará que el técnico chileno no tire de la cantera para completar la convocatoria, pese a que ayer siguió entrenándose con la primera plantilla el paraguayo Acuña, segundo punta del Castilla.

El Alcorcón, por su parte, pretende emular al Toledo y Real Unión, equipos que en su día dieron el campanazo de eliminar al Real Madrid, y disfrutar cada segundo de una eliminatoria que hace un sueño realidad.