El Coruxo rompió la racha negativa que desde hace casi un mes le impedía sumar una victoria y, además, volvió a los puestos de clasificación para la fase de ascenso. El Lalín, por su parte, llegó a O Vao con demasiados temores, aunque pudo adelantarse en el marcador en una de las dos claras ocasiones que tuvo a lo largo del encuentro.
Vigueses y dezanos afrontaron el encuentro con distintos objetivos. El de los de O Vao no era otro que conseguir la victoria, mientras que al Lalín se le veía demasiado reservón, con una defensa en línea muy adelantada que intentaba sorprender a los vigueses con robar algún balón para salir a la contra.
La primera gran ocasión de los vigueses llegó a los veinte minutos de juego, en una perfecta combinación entre Marco y Richi, que finalizó éste con un gran disparo desde la frontal ante el que nada pudo hacer Vila. Sin embargo los vigueses no pudieron celebrar el tanto, ya que el árbitro auxiliar levantó el banderín anulando la jugada por fuera de juego del delantero vigués.
A pesar de la teórica superioridad de los vigueses, que tenían el balón en sus pies pero no creaban peligro ante la portería de Vila, a excepción de la ocasión de Richi, fue el Lalín el que dispuso de la mejor ocasión para adelantarse en el marcador. Dabozuas se quedó sólo ante Jorge Pérez, pero su disparo salió ajustado al palo izquierdo del gaurdameta vigués.
Ahí se acabó todo para el Lalín, pues un minuto más tarde, Richi obtenía premio a su presión sobre la defensa dezana, rompiendo la igualada inicial.
Fue un tanto que hizo mucho daño al Lalín, que durante varismo minutos estuvo descolocado sin que los vigueses supieran aprovechar dicha circunstanacia para ampliar el marcador.
De nuevo Dabouza pudo marcar para el Lalín a cinco minutos para el descanso, pero su disparo fue despejado en esta ocasión por el guardameta vigués Jorge Pérez.
Los cinco primeros minutos de la segunda parte fueron matadores para el Coruxo. Los de Josiño Abalde salieron mucho más centrados que los dezanos, y en tres minutos terminaron por sentenciar el encuentro.
El resto del encuentro transcurrió sin sobresaltos. Acevedo movió el banquillo buscando darle un poco más de aire a su delantera, pero la defensa el Coruxo se mostró certera, certificando una nueva victoria.
