Los dos equipos empezaron muy fríos el primer periodo con estrepitosos fallos bajo el aro, aunque los andaluces fueron los primeros en despertar del letargo y los que se adelantaron en el electrónico con un magnífico Marc Jackson que metió los tres tiros libres en una falta que consiguió con mucha picardía.

Los de Trifón Poch parecían romper el partido al conseguir una ventaja de siete puntos (18-25) gracias a Joseph Ingles, pero Maxi Stanic metió dos triples increíbles, el segundo sobre la bocina en una posición física desequilibrada del lanzador. Así el marcador se situó en un 24-25.

El segundo cuarto empezó más o menos como el primero, con el Granada llevando la iniciativa y un parcial de 0-9 a su favor. El técnico local tuvo que realizar varios cambios pra evitar que la situación se volviera insostenible.

A partir de este momento y hasta el descanso la ventaja se mantuvo constante de 10 puntos.

En la reanudación los de casa empezaron a defender como saben pero les sirvió de poco porque el rival aumentó más la diferencia.

Al final, con todo lo que remó el Obradoiro se colocó en el último ataque uno abajo (78-79) y Terry falló el triple, pero le hicieron falta a Sánchez en el rebote y anotó el primer tiro libre para empatar.

El segundo lo falló, la pelota se fue fuera. Con un segundo y cuatro décimas y sacando el Xacobeo la afición tenía esperanzas de que su equipo se apuntara la primera victoria pero un tapón sobre Terry llevó el partido al tiempo extra (79-79).

La prórroga no tuvo color, los visitantes se impusieron sin demasiado esfuerzo.