El cambio de sistema ensayado por Eusebio Sacristán en el Nuevo Colombino ha sido flor de un día. Mejor dicho, flor de un solo tiempo, porque en la segunda parte el preparador vallisoletano recuperó el 4-3-3, el dibujo que él ha implantado en el Celta y con el que el equipo ha venido trabajando en los últimos meses.

Eusebio no ocultó tras el partido ante el Recreativo su satisfacción por la mejoría experimentada por el equipo en cuanto se volvió a jugar con un 4-3-3. Explicó que los matices que había tratado de introducir no habían resultado, pero valoró el hecho de que en cuanto recuperó su aspecto habitual, el juego del equipo ganó en fluidez y eficacia.

El técnico volverá repetir el 4-3-3 el miércoles en Copa del Rey ante el Girona (en un partido en el que podrían jugar Túñez y Toni, los jugadores del Celta B que ayer se incorporaron a la concentración del Celta en Barcelona) y el próximo sábado, en Liga, ante el Albacete.

Por otra parte, Borja Oubiña será intervenido esta tarde en Barcelona de su lesión en la rodilla izquierda por el prestigioso cirujano traumatólogo Ramón Cugat. En el mejor de los casos, el jugador celeste estará de baja unos once meses.