El Celta Indepo ya tiene en sus vitrinas el trofeo más importante de la pretemporada, la Copa Galicia. A priori era el gran favorito para conquistar el torneo, pero ayer sudó más de lo previsto para hacerse la victoria ante un combativo Pio XII.

Las de Miguel Méndez acusaron el desgaste del día anterior, y la carga de trabajo a la que el técnico está sometiendo al equipo en esta pretemporada. Lo cierto es que el Celta Indepo jugó a medio gas, aunque tampoco hay que restarle méritos al conjunto santiagués, que en ningún momento dio por perdido el encuentro y llegó a tener opciones a dos minutos del final.

Ayer no fue día para demasiadas pruebas ni para darle minutos a las más jóvenes, ya que lo que se considera el equipo titular fue quien tuvo que sacar las castañas del fuego. Los que ayer presenciaron el encuentro se pudieron dar cuenta de que se va a sufrir mucho a lo largo de la temporada, ya que si de fuera hay respuesta, en el juego interior puede haber problemas.

El Pío se mantuvo en el partido gracias a su acierto desde la línea de 6.25. Tanto Román como Sofía Da Costa consiguieron mantener a su equipo en el encuentro, ante un Celta Indepo al que se veía incómodo y que no era capaz de sentenciar.

Mejoraron las viguesas tras el descanso, consiguiendo marcharse con diez y doce puntos de ventaja. Parecía que el partido estaba sentenciado y quizás llegó un poco de relajación, pero el Pio, que no se había dado por vencido, volvió a aprovechar el tiro exterior para colocarse a cinco puntos a un minuto para el final del choque.

En ese momento apareció la veteranía de Pilar Valero, que se echó encima la responsabilidad del equipo, consiguiendo unas canastas tranquilizadoras que hicieron que aumentase la ventaja y el Celta sentenciara definitivamente la victoria.

La céltica Sara Gómez fue elegida la MVP de la final.