El Xacobeo Galicia da por seguro que el líder del equipo, Ezequiel Mosquera, no podrá correr el Giro de Italia por culpa de un accidente doméstico al que en un principio se le restó importancia. Sin embargo, las pruebas médicas a las que fue sometido el ciclista gallego en las últimas horas confirmaron que éste sufre una fractura de radio de su antebrazo izquierdo. Los médicos no pierden la esperanza de que pueda recuperarse a tiempo.

Las alarmas se han encendido en torno a la lesión que había sufrido Ezequiel Mosquera, hasta el punto de que en estos momentos su participación en el Giro del Centenario está “prácticamente descartada”, según indicó el mánager del equipo Álvaro Pino. Lo que parecía un accidente doméstico menor, tanto por el lugar donde ocurrió (la propia casa del ciclista) como por su escasa gravedad, tiene en estos momentos al líder del Xacobeo Galicia más fuera que dentro de la relación de participantes en la ronda italiana que se inicia en mayo.

Mosquera se había caído el pasado domingo subiendo las escaleras de su casa. Al apoyar las manos notó unas molestias en su muñeca izquierda y, aunque las primeras radiografías no revelaron ninguna anomalía significativa, con el paso de los días ni la inflamación ni el dolor desaparecían, por lo que el pasado viernes fue sometido a unas exploraciones más exhaustivas, que descubrieron una fisura o, en términos médicos, una fractura en la apófisis estiloide del radio de su antebrazo izquierdo.

En un primer momento se sopesó la posibilidad de realizarle una sujeción con tornillos, pero los traumatólogos especialistas en medicina deportiva consultados por el equipo gallego descartaron finalmente esta opción por “dolorosa y poco eficaz” dada la naturaleza de la fractura. Esos mismos doctores dejaron en el aire un pequeño rayo de esperanza al comentar que este tipo de lesiones podrían curarse en quince días, exactamente los que faltan para que dé comienzo el Giro de Italia.

El problema, aún en el caso nada seguro de que la lesión remitiese en ese espacio de tiempo, es que no se puede acudir a una carrera de tan alto nivel de exigencia sin un entrenamiento mínimo. Y la fractura es en la articulación de la muñeca, una zona “muy complicada por las acciones de tracción, apoyo y giro que el ciclista se ve obligado a realizar continuamente”, según apuntan también los expertos.

Ezequiel Mosquera, cuarto en la pasada edición de la Vuelta Ciclista a España, se había tomado con enorme ilusión su participación en el Giro del Centenario, donde quería buscar su confirmación internacional. Esa ilusión es la que impide arrojar todavía la toalla, aferrándose a “un pequeño milagro”, que es al que también se acoge Álvaro Pino, aunque en estos momentos busca ya alternativas a la ausencia del líder del equipo, porque la puerta del Giro de Italia parece estar más cerrada que abierta para el corredor del municipio de Teo.