El Levante rescató un punto de Balaídos gracias a dos regalos defensivos de un Celta que se complica, un poco más, su futuro.

Los celestes llegaron a ir ganando por dos goles a cero pero la afición viguesa revivió la misma película de los últimos partidos y mostró su enfado con una sonora pitada al finalizar el partido.

La primera parte fue un auténtico tostón para los poco más de cinco mil espectadores que se acercaron a Balaídos. El Levante, pese a no jugarse nada en el choque, renunció al fútbol desde el primer minuto.

Los jugadores de Luís García se limitaron a defender su portería, esperando sorprender a los celestes en alguna acción de contraataque.

Y cerca estuvieron de conseguirlo, ya que en el minuto 12 Rubén, con un disparo lejano, enmudeció el estadio vigués. Poco después, Xisco Nadal, tras ganarle la espalda a la zaga celeste, obligó al meta Falcón a salir de su área para evitar el remate del ataque visitante.

Por su parte, el Celta, a pesar del cambio de sistema y de que la victoria de ayer del Alavés le obligaba a ganar, no logró mejorar la pobre imagen que viene mostrando en las últimas jornadas.

El Celta carece de un organizador ofensivo que ayude a Roberto Trashorras en las funciones de creación, le falta profundidad por las bandas y sobrevive gracias a las individualidades de alguno de sus futbolistas.

En la primera parte los de Eusebio gozaron de cinco minutos de inspiración, sobrepasado el ecuador del primer acto, pero tuvieron que esperar hasta el minuto 45 para lograr el primer tanto de la tarde: saque de esquina ejecutado por Renán y cabezazo impecable de Óscar Díaz. 1-0 y premio para el menos malo de los dos, para el que más empeño puso en llevarse los tres puntos.

Una ventaja que los gallegos lograron ampliar a los cuatro minutos de la reanudación gracias a un nuevo tanto, el cuarto que consigue de manera consecutiva, del argelino Kamel Ghilas, el jugador más en forma de los celestes.

Pero este Celta está abonado al sufrimiento. Un nuevo error defensivo privó a los de Eusebio de una tarde tranquila, ya que el gol de Pedro Vega, en el minuto 57, metió al Levante en el choque.

Los vigueses pudieron matar el partido poco después del tanto visitante, pero David Rodríguez, que acaba de sustituir a un desaparecido Dinei, falló en el mano a mano con Miguel Reina.

Y el que perdona lo acaba pagando, sobre todo si en defensa un equipo muestra las carencias que tiene el actual Celta.

Un nuevo despiste defensivo, en una acción similar a la del primer tanto visitante, lo volvió a aprovechar el zurdo Pedro Vega para arrancar los primeros silbidos de las gradas de Balaídos.

A partir de ahí, el encuentro se convirtió en un querer y no poder de un Celta que cada vez juega más con la amenaza del descenso, zona que ahora mismo sólo tiene a cinco puntos.

2-Celta

: Falcón; Óscar Díaz (Dani Abalo, min.81), Noguerol, Peña, Jordi, Roberto Lago; Renán (Michu, min.78), Rosada, Trashorras; Ghilas y Dinei (David Rodríguez, min.66).

2-Levante:

Reina; Molinero, Robusté, Tena, Vázquez; Gorka Larrea (Pina, min.71), Samuel; Miguel Pérez (Del Moral, min.59), Rubén (Yago, min.90), Pedro Vega; Xisco Nadal.

Goles:

1-0 min. 45: Óscar Díaz; 2-0, min.49: Ghilas; 2-1, min.57: Pedro Vega; 2-2, min. 74: Pedro Vega.

Árbitro:

Estrada Fernández (comité catalán). Amonestó a Noguerol (m.39), Óscar Díaz (min.55) y Ghilas (min.84), por parte del Celta, y a Rubén (m.45), Larrea (min.68) y Samuel (min.89) por el Levante.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la trigésimo cuarta jornada de la liga Adelante disputado en el estadio municipal de Balaídos ante 5.755 espectadores, según fuentes del club.