Denominada por los australianos 'La regata del infierno', tiene un recorrido de 628 millas náuticas (1.164 Km.) entre el puerto de Sydney en la costa Este de Australia y el de Hobart en la isla de Tasmania.

Su impacto mediático y su prestigio es sólo comparable a los de la Copa América y la Volvo Ocean Race, que se celebran cada cuatro años, y es la prueba deportiva más carismática y temida de las que se disputan anualmente en el hemisferio Sur.

Precisamente este año es el décimo aniversario de la tragedia de 1998 en la que perecieron seis navegantes, nueve embarcaciones naufragaron y cuarenta abandonaron en el estrecho de Bass cuando les alcanzaron vientos de hasta 80 nudos (150 Km/h.) y olas de más de 15 metros.

El Estrecho de Bass, conocido como 'paddock', está considerado como una de las zonas de navegación más peligrosas del mundo.Se puede encontrar en calma total o envuelto en un espectacular temporal. Sus aguas son relativamente poco profundas y los vientos pueden ser muy fuertes. Estos dos elementos en conjunción pueden crear unas condiciones de navegación dantescas.

Para esta edición se esperan vientos del Oeste de 25 a 30 nudos (48 a 58 Km/h.).

El gran favorito es el poderoso maxi australiano 'Wild Oats XI', del magnate del vino Bob Oatley y patroneado por Mark Richards, vencedor en tiempo real de las tres anteriores ediciones y poseedor desde el 2005 del récord del recorrido (1d. 18h. 40' 10").

Un nuevo triunfo del 'Wild Oats XI' la convertiría en la primera embarcación que logra la victoria cuatro veces consecutivas en la prueba, superando el legendario récord de tres triunfos que igualó el año pasado y que poseía el 'Morna' de Claude Plowman desde 1948.

El "Wild Oats XI" es un diseño de Reichel/Pugh de 98 pies de eslora (29,90 metros) con quilla pivotante. Fue botado en diciembre del 2005 y costó unos 6 millones de euros.

Su gran rival es el veterano maxi 'Skandia' de Grant Wharington, vencedor en el 2003 y al que desde entonces le han perseguido roturas y desastres en la prueba.

El tercer maxi en liza es el 'ASM Shockwave 5', un diseño de Reichel & Pugh de 80 pies (24,40 metros) al mando del australiano Andrew Short.

Todo apunta a que los tres poderosos maxis no tendrán rival en la lucha por la victoria en tiempo real, pero todo está más abierto en tiempo compensado (aplicando un factor de compensación por la menor eslora y antigüedad del barco). En esta clasificación los grandes favoritos son el VO70 de 21,30 metros de eslora 'Ichi Ban' de Matt Allen, tercero el pasado año, y el nuevo 'Loki' de Stephen Ainsworth, un diseño de R&P de 19,2 metros de eslora.

Otro aspirante al triunfo en tiempo compensado es el veterano 'Ragamuffin' de Syd Fisher, con la nueva figura de la vela neozelandesa como patrón, Adam Minoprio. Fisher, de 81 años, competirá en su 40 Sydney-Hobart.

En esta edición se superará otro legendario récord: el de navegante con mayor numero de participaciones. Lo tenía, con 44, el mítico John Bennetto y el pasado año lo igualaron el veterano Louy Abrahams, de 80 años, y Toni Cable, de 66, que será el que bata la marca porque Abrahams no compite.

El navegante de más edad que participa este año es John Walker, de 86 años, patrón del 'Impeccable'. En los últimos 25 años sólo ha faltado una vez a la cita por culpa de una operación a corazón abierto.