El hasta ayer entrenador del Real Murcia Javier Clemente fue destituido tras la llegada del nuevo consejo de administración del club pimentonero, que decidió la salida del técnico vasco tras los malos resultados deportivos. Clemente se convierte así en el séptimo técnico que pierde el puesto en la actual temporada de Segunda División.

Clemente, que llegó al Murcia la pasada temporada para evitar su descenso a Segunda, no consiguió la permanencia, y renovó para seguir en la categoría de plata, donde tenía como objetivo regresar a la Primera División al contar con el segundo presupuesto más elevado del campeonato.

Tras 16 jornadas de Liga, los murcianos son vigésimos en la tabla -con sólo tres triunfos en su haber- y a cinco puntos del decimoctavo lugar. Una crisis que no sólo ha sido deportiva porque su presidente al comienzo de la campaña, Jesús Samper, decidió quedarse al margen y dejar el club a cargo de una nueva junta directiva.

De esta forma, la salida prematura de Clemente permite el relevo del entrenador del filial, José Miguel Campos, que se hará cargo del club para el partido de este fin de semana ante el Celta.

José Miguel Campos, entrenador que hasta ahora ha dirigido al Real Murcia Imperial, equipo filial que milita en el Grupo II de Segunda División B, será el entrenador del primer equipo grana. Campos, natural de Mazarrón, de 42 años, lleva tres temporadas en la entidad murcianista y anteriormente, desde el año 2000, dirigió al Abarán en Preferente, al Bala Azul en Tercera y al Baza en Tercera y en Segunda B.

Entre sus logros destaca el ascenso a Tercera con el Abarán en 2001 y a Segunda B con el Baza en 2005 y con el filial del Murcia la pasada campaña.

Como futbolista militó durante cinco temporadas en el Imperial y posteriormente lo hizo en el Alcoyano, el Jaén, el Mármol Macael y el Melilla. En Segunda División debutará el sábado ante el Celta en el estadio Nueva Condomina. A partir de ese partido tratará de enderezar el rumbo del equipo, que es el antepenúltimo clasificado con 13 puntos sumados en 16 jornadas y está a cinco de las posiciones que dan la permanencia.

Guillamón, presidente

Por otra parte, Juan Guillamón, que ayer fue nombrado presidente del Real Murcia indicó que afronta este reto con el propósito de "salvar la temporada como podamos y ya veremos qué pasa en el futuro".

Guillamón, decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Región de Murcia y que ha sido consejero del Murcia durante los últimos años, sustituye en la presidencia de la entidad deportiva a Jesús Samper, después de que éste renunciara al cargo la pasada semana.

En todo caso Samper sigue siendo el dueño del club junto a su cuñado y socio, Juan Manuel Trujillo, pues entre ambos tienen el 98% de las acciones de la sociedad anónima deportiva.

El nuevo presidente anunció que fue él personalmente quien comunicó a Javier Clemente que dejaba de ser el entrenador. "Ha sido absolutamente sencillo decirle a Javier Clemente que dejaba de ser nuestro entrenador y él ha dado todo tipo de facilidades, mostrando su simpatía. Es genio y figura y me ha dicho que si le íbamos a echar y que cuánto le íbamos a pagar".

Dada la situación del equipo, que es el vigésimo clasificado de entre 22 competidores y está a cinco puntos de los puestos de permanencia cuando su objetivo era el ascenso a Primera, Guillamón llegó a decir que su llegada a la presidencia es "un caramelo envenenado que acepto con generosidad y obligado por el cariño que le tengo al club".

Guillamón, un enamorado del fútbol y habitual comentarista televisivo, se centró en el futuro inmediato y señaló que "como no le ganemos al Celta el sábado esto se va a fastidiar".