Luis Aragonés, que compareció en conferencia de prensa un día después del histórico pase a semifinales de la "Roja", manifestó, sobre Iker Casillas, que detuvo dos lanzamientos en la tanda de penaltis, que es un "diez en todo".

"Iker ha demostrado que es un diez en todo, en la portería, en la capitanía, en su comportamiento. Lo tiene todo clarísimo. Sólo tiene 27 años, así que imagínate lo que va a ser en adelante, con todo el tiempo que le queda. Todo el grupo ha sido un 10, pero especialmente el capitán con quien he dialogado más. Es un fenómeno", declaró el técnico, quien mostró su cara amable.

Luis también tuvo palabras de elogio para el otro héroe de la noche en Viena, el centrocampista Cesc Fábregas, que transformó el penalti que le dio a España el billete para las semifinales.

El entrenador, que no detalló por qué le dio al jugador la responsabilidad de ser el ultimo lanzador, dijo que estaba seguro de que lo iba a meter. "Esas son cosas íntimas, del vestuario. Le mandé tirar por algo que no voy a decir. Lo que sí sabía seguro es que lo iba a meter", explicó Aragonés, quien añadió que vio la tanda de penaltis con interés. "No soy de esos que no miran. Me dolió que fallase Guiza, porque el chico estaba bastante triste. Hablamos con él para que se olvidase".

El seleccionador, que logró una clasificación histórica con España, ya que desde 1984 la selección no estaba en la penúltima ronda de la Eurocopa, declaró que no ha sentido que se haya quitado un peso de encima. "Sólo siento que el trabajo ha sido bueno. No tenía ninguna carga. Le estoy agradecido a todo el mundo, incluso a los que me han criticado, que me han llevado a pensar más todavía, y a todo el mundo en líneas generales. Fundamentalmente a los jugadores, que forman un grupo importante".

Sobre Rusia, el próximo rival, Luis indicó que físicamente es el más fuerte de los cuatro semifinalistas. "Rusia no ha mejorado solo por Arshavin, que sin duda mejora cualquier cosa. Ha ido de menos a más. Sorprender a Hiddink va a ser difícil. Es un equipo que le gusta atacar, por lo que habrá que presionar bien en el centro del campo para salir al contraataque".

El entrenador dejó bien claro que no seguirá al frente de la selección, ni en el supuesto de que ganase la Eurocopa. "Agradezco cualquier palabra que me piropee, pero sabe la Federación y todos vosotros que esto se acaba, termine como termine. Estoy orgulloso de que los resultados hayan sido buenos, que mi trabajo haya servido para bastante, para dejar un grupo y un equipo que se deja la piel en el campo, que forman un ambiente formidable. Todo eso va en mi currículum. No me meto en si me tienen que ofrecer renovar el cargo. Se terminó y punto", declaró.