Las selecciones de Rusia y Holanda afrontan el tercer duelo de cuartos de la Eurocopa en un choque que se presenta a priori desigual. Los de Van Basten parten como favoritos después del gran nivel que han mostrado en la fase previa, pero la Rusia de Guus Hiddink no se lo pondrá ni mucho menos sencillo.

Los holandeses llegan al partido aún consternados por la muerte de la hija de Jalid Boulahrouz, que había nacido prematuramente el pasado miércoles. La selección de Van Basten forma un gran grupo humano, ya que sus familias acompañan al equipo a todos los partidos y existe una relación especial en este sentido.

Boulahrouz está dispuesto a jugar mañana ante los rusos y el técnico es quien tiene que decidir. Le dio permiso al jugador para estar "todo el tiempo que quisiera con su mujer", pero el defensa del Sevilla se ha reincorporado al equipo y apunta a la titularidad.

Los holandeses encarrilaron muy pronto su clasificación para los cuartos de final después de ganar a Italia y Francia con suficiencia y afrontaron el tercer encuentro, ante Rumanía, con jugadores suplentes.

No es una buena noticia para el equipo de Van Basten que Guus Hiddink sea el entrenador de los rusos. Hiddink, un trotamundos del fútbol, también dirigió en su día a la selección de su país. Fue entre 1994 y 1998, en una etapa en la que Holanda cayó en penaltis en los cuartos de final de la Eurocopa de Inglaterra y frente a Brasil en el Mundial de Francia.

Se sabe todos los entresijos del fútbol, con los que ha triunfado en latitudes tan diversas como Corea del Sur, Australia o Rusia. El técnico conoce a la perfección a Holanda. El problema es si tiene los recursos suficientes como para sacar adelante el partido frente a un rival de entidad.

Van Basten repite once

Marco Van Basten no se plantea realizar muchos cambios respecto al equipo que maravilló con su fútbol en los dos primeros partidos. La solidez defensiva le hace pensar en Boulahrouz, Ooijer, Mathijsen y Van Bronckhorst.

Por detrás de la defensa de Jong y Engelaar ofrecen equilibrio y contención para la tripleta de medios creativos: Sneijder, van der Vaart y Kuyt. Van Basten dispone además en la recámara de jugadores como Robben y Van Persie, determinantes cuando han aparecido en el campo, un lujo al alcance de pocos. Delante no tiene dudas con el madridista Ruud Van Nistelrooy.

Sabedor del potencial de Holanda, a Hiddink se le acumula el trabajo. Después de dos partidos sin poder contar con Arshavin, su jugador más determinante, el futbolista del Zenith de San Petersburgo apareció ante Suecia para convertirse en el salvador del equipo. Rusia gana muchos enteros cuando él está en juego, algo que no ocurrió frente a la selección española.

El experimentado técnico de Rusia sabe de la dificultad de frenar a la tripleta de centrocampistas holandeses. Snejder, Van der Vaart y Kuyt parecen la mayor amenaza del equipo "oranje".