Abel Caballero defendió ayer que su posición supone dar un paso adelante para salvar a la entidad, hasta el punto de afirmar que cualquier posicionamiento en contra de sus tesis equivale, en la práctica la desaparición de la entidad. "Esto no le cuesta nada a la ciudad y es un intento de salvar al Celta. Los que quieran que desaparezca el Celta o que esté en Tercera que lo digan abiertamente. Que digan, no queremos que se firme este acuerdo queremos que el Celta desaparezca", afirmó en velada referencia al teniente de alcalde. El regidor añadió que su intención es que el Celta no siga los pasos de otros clubes en su situación.

"En otras ciudades el fútbol desapareció y están intentando recuperarlo. En Málaga, Gijón, Oviedo. Porque el fútbol juega un papel en el ámbito de representación de la ciudad y nosotros lo vemos así. Los que dicen aquí que hay una aportación a una SAD, que por cierto este alcalde no tuvo nada que ver", indicó.

Abel Caballero, por último, se mostró tajante al asegurar que la negociación con el Celta sobre el convenio de Balaídos compete exclusivamente a la Concejalía de Patrimonio que dirige Carlos López Font.