El piloto de Ferrari Kimi Räikkönen, actual campeón mundial de Fórmula Uno, dedicó hoy duras palabras a su principal rival, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), a raíz del incidente que obligó a ambos a retirarse en el Gran Premio de Canadá disputado el pasado domingo.

Hamilton embistió por detrás a Räikkönen después de realizar el primer repostaje, mientras éste esperaba, junto al polaco Robert Kubica (BMW Sauber), a que el semáforo de acceso a la pista se pusiera verde.

El error del británico llevó a los comisarios deportivos del GP de Canadá a sancionar a Hamilton con la pérdida de diez puestos en la formación de salida de la próxima carrera del Mundial, que se disputará en Francia el 22 de junio.

"Personalmente, creo que Hamilton mereció la sanción. Perderá diez puestos en el GP de Francia y, al menos, eso no va a ponerle las cosas nada fáciles", afirmó Räikkönen en declaraciones publicadas en su página web.

El finlandés calificó el incidente como "una amarga sorpresa y una decepción", y, aunque no lo dijo claramente, insinuó la posibilidad de que el choque no fuese del todo involuntario.

"No puedo creer que alguien pueda golpearte cuando estás parado frente a un semáforo rojo junto a otro coche. No puedo creer que no viera la luz roja y, lo que es peor, que no viera los dos coches inmóviles", señaló.

"El semáforo rojo se veía muy bien, y además su equipo debió de informarle por radio", añadió.

El incidente impidió a Räikkönen lograr su quinto podio de la temporada, y le relegó a la cuarta posición en la clasificación de pilotos, a siete puntos de Robert Kubica y a tres de Lewis Hamilton y de su compañero de Ferrari, el brasileño Felipe Massa.