El ciclista belga Tom Boonen, campeón del mundo en 2005, dio positivo en un control de cocaína dos días antes de la Vuelta a Bélgica, según confirmó ayer la fiscalía de Turnhout (norte de Bélgica) en un comunicado.

Boonen fue sorprendido el pasado 26 de mayo, durante un control antidopaje fuera de la competición en el que se encontró un metabolito de cocaína en la orina del ciclista. "La fiscalía de Turnhout inició una instrucción por presunta posesión de cocaína", ha explicado la portavoz Inge Delissen.

En el marco de la investigación, se han registrado dos casas sin resultado y, aunque la fiscalía no revela de qué domicilios se trata, la prensa belga alude a que sea el de los padres y el de la novia del ciclista. Boonen no está detenido pero sí fue interrogado.

El código mundial antidopaje no prohíbe el uso de cocaína fuera de las competiciones, pero como el control tuvo lugar apenas dos días antes del inicio de la Vuelta a Bélgica, el expediente se mandará a la Unión Ciclista Internacional (UCI) y a la Agencia Mundial Antidopaje (WADA).

Tom Boonen se arriesga a una suspensión de dos años, según señala el diario "Het Laatste Nieuws". El corredor ya había sido relacionado con el consumo de cocaína en diciembre pasado, cuando dio positivo otro ciclista de ciclocross belga, Tom Vanoppen, quién señaló que había obtenido la droga de Boonen.