El Barcelona será el último escollo al que deberá enfrentarse el Celta juvenil para estar en la gran final de la Copa del Rey. El sorteo celebrado ayer en la sede de la Federación Española no respetó a los célticos, que se miden a uno de los grandes del fútbol juvenil español. El partido de ida se disputará el próximo domingo, a partir de las 12 horas, en las instalaciones de A Madroa.

El Barcelona se clasificó segundo en el grupo VII, con tres puntos menos que el campeón que fue el Villarreal. Cinco empates y siete derrotas es el balance del equipo que entrena Alejandro García, que fuera de casa perdió cinco partidos y empató en tres ocasiones.

En la presente edición del torneo copero, el Barcelona ha disputado complicadas eliminatorias, ya que en primera ronda se midió al Real Madrid, al que venció 2-0 en casa empatando a un tanto en Madrid; mientras que en segunda ronda se midió con el Espanyol, registrándose el mismo resultado en los dos partidos.

Al igual que sucediera hace quince días ante el Zaragoza, los vigueses saben que será muy importante dejar la eliminatoria abierta en A Madroa, ya que como viene sucediendo a lo largo de toda la temporada, los vigueses están haciendo mejores partidos lejos de casa que en A Madroa.

Además, el partido del domingo podría ser el último del cuerpo técnico, ya que todo apunta a que la próxima temporada tanto Álex como el delegado del equipo abandonarán el club dentro de los cambios que se han hecho desde la llegada el nuevo presidente del Consejo de Administración.