Luis Miguel Pascual / parís

El cuarto título Roland Garros de Rafael Nadal no fue festejado con la tradicional recepción en la Embajada de España en París, suspendida por el conflicto de los tenistas con el presidente de la Real Federación Española de Tenis (RFET), Pedro Muñoz.

Según indicaron fuentes oficiales, el entorno de Nadal advirtió a la legación diplomática que no acudiría a la recepción si en ella estaba invitado Muñoz, con quien el cuádruple campeón de Roland Garros y otros miembros del equipo de Copa Davis mantienen un contencioso.

La ministra de Educación, Política Social y Deporte, Mercedes Cabrera, confirmó que la anulación de la ceremonia de la Embajada se debe al conflicto "que todo el mundo conoce", en una clara referencia al enfrentamiento entre los tenistas y Muñoz.

La ministra mostró su deseo de que se resuelva este contencioso, trasladado a la opinión pública después de que los miembros del equipo español de Copa Davis publicaran una carta en la que mostraban su rechazo a la política de Muñoz y le calificaran de mentiroso. Para Cabrera es "urgente" que se solucione el problema, "sobre todo con esta sucesión de éxitos del tenis español".

El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, afirmó desconocer las causas por las cuales ningún miembro de la Casa Real viajó a París, aunque confirmó que hasta el sábado mismo tenían previsto viajar. En cuanto a la anulación de la recepción en la Embajada, Lissavetzky afirmó que "para que haya fiestas tiene que haber ambiente adecuado" y se mostró seguro de que el año próximo podrá celebrarse el triunfo de Nadal. "Va a haber más Roland Garros y también algún Wimbledon y tendremos otras celebraciones, porque tal y como está Nadal no hay quien le moje la oreja", afirmó.

Toni Nadal, tío y entrenador del cuádruple ganador de París, no quiso entrar en la polémica sobre el motivo de la anulación de la recepción en la Embajada.

Pese a que no hubo fiesta, todas las autoridades felicitaron a Rafa por su cuarto Roland Garros consecutivo.

En el palco, además de la ministra Cabrera, estuvo presente el presidente de honor del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch; el alcalde de París, Bertrand Delanoe, y la ministra francesa de Sanidad y Deportes, Roselyne Bachelot, acompañada del secretario de Estado para el Deporte, Bernard Laporte. También presenció la final el secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, mientras que en el palco de la familia Nadal pudo verse al presidente del Real Madrid, Ramón Calderón.

Los ex tenistas Bjorn Borg (encargado de entregar a Nadal el trofeo de los Mosqueteros), Guillermo Vilas, Manolo Santana, Mary Pierce o Gabriela Sabatini también presenciaron la final en el palco presidencial, al igual que Arantxa Sánchez Vicario, que afirmó que "sabía que Nadal ganaría de todas formas" porque "psicológicamente le tiene comida la moral. Esperaba un partido mejor, pero ganar cuatro Roland Garros no es nada fácil y me alegro mucho por él", afirmó la ganadora del Grand Slam de París de 1989, 1994 y 1998, que ayer fue superada en la estadística por el mallorquín.