AUSTRIA 0 - 1 CROACIA
Antonio Sánchez Solís / viena
Austria sufrió ayer la misma suerte que la co anfitriona Suiza corrió el sábado contra la República Checa, y perdió inmerecidamente por 0-1 contra una Croacia que, si bien dominó la primera mitad, se hundió ante unos austríacos que demostraron que pueden jugar al fútbol.
Una falta de Aufhauser sobre Olic, en el minuto 3, castigada con la pena máxima por el árbitro holandés Pieter Vink elevó el 0-1 en el marcador. Luka Modric, la joven estrella croata, no perdonó y lanzó un balón bajo por el centro que el arquero austríaco no pudo atajar. Como propina, Pogatetz se llevó una cartulina amarilla por protestar la decisión del colegiado.
El temprano revés dejó a los pupilos de Hickersberger noqueados durante buena parte del primer tiempo.
La salida al campo del héroe austríaco Ivica Vastic, de origen croata, hundió el estadio en gritos de entusiasmo y animó la distribución de juego de los austríacos desde el centro del campo.
Korkmaz, en sustitución de Gercaliu, apretó aún más tuercas a los croatas, replegados en su área, pero sin lograr el tanto del empate.
Austria lo intentó con ganas, y Vastic, convertido en corazón de los austríacos hizo que el portero croata se empleara a fondo, pero al final la afición local se fue desencantada porque en el marcador sólo reflejaba el penalti de la otra joven estrella del partido, el croata Modric.
