Conocida era la baja, por sanción -de dos partidos-, del 'cerebro' del conjunto ruso, Andrei Arshavin, compañero de Pogrebnyak en el impresionante Zenit de San Petersburgo, último ganador de la Copa de la UEFA. Y la confirmación de la del espigado atacante era una mera cuestión de ver caer la fruta madura.

Pogrebnyak, el máximo goleador junto al italiano Luca Toni de la segunda competición europea por equipos, sufrió un desgarro en el menisco de la pierna izquierda durante el amistoso disputado la pasada semana contra Serbia. Desde entonces, no se volvió a entrenar.

Hoy se redactó, finalmente, la crónica de una baja anunciada.

Pogrebnyak lo intentó hasta el último momento, pero no hubo vuelta de hoja. En la sesión de ayer, viernes, quiso a toda costa entrenarse junto a sus compañeros, pero se dio cuenta de que le resultaba totalmente imposible correr.

"Por supuesto, estoy decepcionado. Esperaba poder quedarme con el equipo. Durante el partido contra Serbia forcé un poco y sentí un fuerte dolor en la rodilla. Tras ese partido albergaba esperanzas, pero no muy grandes. Me voy mañana por la tarde", dijo tras conocer que no disputará su primera Eurocopa.

Con la decisión tomada, sólo faltaba que la comisión médica de la UEFA confirmara su dolencia para que la noticia se hiciera oficial.

Tanto Hiddink, como el director deportivo de la Federación Rusa, Víktor Onopko -plusmarquista de comparecencias con su selección (113 en total)-, habían efectuado en las jornadas previas declaraciones en el sentido de que era muy difícil que pudiera jugar contra España, aunque no descartaban del todo una posibilidad a buen seguro más deseada que razonada.

Pero el viernes comprobaron no sólo que no podría enfrentarse a la 'roja', si no que tendría que hacer las maletas. El ex jugador del Espanyol y del Barcelona Igor Korneyev, 'segundo' de Hiddink, ya había admitido en la mañana de hoy, sábado, que Pogrebnyak no jugaría contra España, pero cedió la responsabilidad de efectuar el anuncio final "al propio jugador, a los médicos o al seleccionador".

El futbolista estaba destrozado. Y los médicos ya habían advertido tras el amistoso contra Serbia de que no era del todo inteligente mantenerle en el grupo. Consultado de nuevo por Efe durante el ensayo de hoy en el Steinbergstadion de Leogang, Onopko reconoció que ya sabía cuál era la realidad, pero que prefería no hacer ningún comentario, remitiendo a Hiddink la ceremonia de oficializar un secreto a voces.

Y el holandés -que planteó esta tarde un entrenamiento a puerta abierta, en el que sus jugadores de campo se dividieron en cinco cuartetos que alternaban el predominante trabajo de presión y definición con cambios de ritmo sin esférico- anunció que Pogrebnyak abandonaría el grupo. En su lugar entraría en la lista Oleg Ivanov.

De 21 años y jugador del Krylya Sovetov Samara, Ivanov era el 'vigésimo cuarto hombre' de Hiddink, que, como medida preventiva, había permanecido durante las jornadas previas con el conjunto, a sabiendas de que si se recuperaba la estrella, le sacarían el caramelo de la boca y regresaría a Rusia momentos antes de arrancar el torneo.

El técnico holandés premió el tesón del centrocampista y descartó otras opciones, como las del ex sevillista Aleksander Kerzakhov, ahora en el Dinamo de Moscú, y de Aleksander Pavlenko, del Spartak capitalino. Dos hombres que juegan en punta.

Hiddink también declaró que tiene "decidido" el equipo, pero obviamente, no lo anunció. Será Roman Pavlyuchenko el que haga de '9' ruso y todo parece indicar que en la puerta estará Igor Akinfejev, con una defensa de cuatro -Aleksander Anyukov, Roman Shirokov, Denis Kolodin y Yuri Zhirkov- con el capitán Sergei Semak por delante, como presumible 'perro de presa' de Fernando Torres.

Con Konstantin Zyryanov e Igor Semchov como pivotes, Vladymir Bistrov por la derecha y Diniyar Bilyaletdinov escorado a la izquierda. Aunque de aquí al martes podrían cambiar aún muchas cosas.