El técnico del Celta, Alejandro Menéndez, se mostró muy satisfecho por el rendimiento de sus jugadores, después de sufrir contratiempos como una expulsión o un penalti en contra.

"No fue un partido extraño. En la primera mitad nos sentimos muy cómodos. Si seguimos once contra once hubiésemos ganado cómodamente. La expulsión te condiciona el partido, jugar de otra manera, y el Tenerife es muy peligrosos por dentro, pero el Celta se han dejado el corazón en el campo", comentó Menéndez como resumen de su tercer compromiso liguero al frente de la plantilla céltica.

Es más, el entrenador asturiano se aventuró a poner nota a sus pupilos: "El equipo ha estado de sobresaliente, y sobre todo hay que destacar que se ha desgastado y se ha implicado muchísimo".

Menéndez recordó las acciones que han lastrado al Celta en sus dos últimos compromisos. "Es casi como luchar contra un gigante porque en dos partidos nos pitaron tres penaltis y nos expulsaron a dos jugadores". En ambas, el equipo supo reponerse para sumar dos empates.

La expulsión de Diego Costa la calificó de "acción infantil que ha marcado el partido", pero se fue satisfecho por la imagen del equipo.