Con la excepción del partido del pasado sábado ante el Hércules, la asistencia de espectadores al estadio de Balaídos está siendo apenas ligeramente inferior a la anterior temporada del Celta en Segunda División, según los datos que maneja el club. "La diferencia es que antes se regalaban muchas invitaciones y ahora todos los espectadores pasan por los tornos", afirma la directora de Proyección y Marketing del Celta. Marian Mouriño añade que la directiva ha suprimido el reparto de entradas en los centros escolares y otras instituciones por entender que "supone un agravio hacia el abonado y perjudica claramente a la marca Celta". Como contrapartida, el club ha puesto en marcha diferentes iniciativa de ayuda al socio, como las entradas de acompañante. Pero la gran prioridad del club es la promoción del celtismo entre los más jóvenes. "Hemos detectado cuenta con una masa social bastante envejecida y gran parte de nuestros esfuerzos se centran en el futuro, pero hacer celtistas es algo que no se hace de la noche a la mañana. Nos llevará algún tiempo", dice.