"Todavía no nos sentimos campeones. Aún quedan ocho partidos para que termine la Liga y no creemos que esté todo terminado", aseguro en rueda de prensa en la ciudad deportiva de Valdebebas.

Para Marcelo, la suplencia de su amigo Robinho no se debe a un castigo de Bernd Schuster, y destacó la libertad que les da el técnico alemán.

"Quiero jugar siempre, pero es normal que no pueda hacerlo. Es una decisión del mister y yo estoy contento con los partidos que he jugado. Me siento muy bien con Schuster. Él nos enseña mucho y nos da mucha libertad", aseguró.

El defensa brasileño coincidió con su compañero Iker Casillas, que señala como claves para el título los tres próximos partidos, aunque Marcelo piensa que deben mantener hasta el final la mentalidad mostrada en el último encuentro liguero.

"Estoy totalmente de acuerdo con Iker, pero no sólo los tres próximos partidos, sino todos los que quedan son fuertes y tenemos que seguir trabajando igual para conseguir el objetivo", dijo.

La presencia del Barcelona en Liga de Campeones no reduce sus opciones en la Liga, según el defensa brasileño, y aspira al título junto al Real Madrid y el Villarreal.

"La Liga es muy fuerte y no hay sólo un equipo del que podamos decir que es nuestro rival. Todos están bien y tenemos que trabajar fuerte, con motivación, sin perder de vista a nadie", concluyó.