Las Minas Puerto Flamenco regresa el próximo viernes 19 de mayo (20.00 horas) al Teatro Afundación de Vigo, única cita gallega incluida en su gira internacional por ciudades portuarias, con una nueva versión de su espectáculo, en la que se incorpora el saxofón porque este musical, ganador del Festival de Cante de Las Minas, no ofrece flamenco al uso. El público puede disfrutar, de la mano de sus once artistas -bailaores, cantaores y músicos- de "palos" tan diversos como las soleás, los tanguillos, las alegrías, las seguirillas, las cañas, las bulerías, las vidalitas, las milongas, las guajiras, las colombianas y las habaneras, de un proyecto que alterna el flamenco más puro con la fusión con otros estilos, y que narra la historia de este género en los puertos; de ahí el título. El espectáculo cuenta además con música en directo y con un vestuario de lujo, diseñado por el modisto Francis Montesinos.
La bailaora Yolanda Osuna asegura que Las Minas Puerto Flamenco es el mejor espectáculo para que quienes no hayan escuchado flamenco antes "rompan el hielo" y se acerquen a una expresión artística que está incluida en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
"Creo que debería de haber más intercambio entre las distintas danzas e incluso fusionar flamenco con estas danzas, al igual que se hace con el contemporáneo", explica Osuna, que asegura que lo que hace diferente a Las Minas Puerto Flamenco de otros espectáculos flamencos es su color. "Somos artistas cada uno con su propio estilo dentro de su especialidad, lo que muestra una gran variedad de técnicas, expresiones y estilos, desde el flamenco más puro al contemporáneo porque el flamenco es una música que está en constante evolución", explica la bailaora cordobesa, que ejecuta el estilo tradicional clásico.
Uno de los momentos cumbre de esta nueva versión de Las Minas Puerto Flamenco es el duelo entre la flauta (Óscar de Miguel) y el saxofón (Juan Diego Sáez). "El saxo fusiona muy bien con el flamenco y le da una musicalidad especial", asegura la bailaora, quien aboga por seguir trabajando para que el flamenco continúe creciendo.
En esta gira internacional, la compañía actuará por primera vez en Johannesburgo (Sudáfrica), una experiencia que no solo es enriquecedor para los artistas sino también para el espectáculo. "Los colores, los olores, la gente, toda esa experiencia cultural se siente. En mi caso al menos es así porque yo una persona muy espiritual", dice. Y el flamenco, añade, también lo es.
