1. La frase del escudo vigués viene de la Reconquista

ReconquistaEl primer Cronista Oficial de Vigo, Nicolás Taboada Leal, en su "Descripción Topográfico-Histórica de la Ciudad de Vigo" relata que "en consideración a los importantes servicios que ha prestado este pueblo en 1809, siendo el primero de Galicia que sacudió el yugo francés, la Suprema Regencia de España e Indias, con sede en Cádiz, por Real Decreto del 1 de marzo de 1810, elevó a Leal y Valerosa Ciudad la que antes era Fiel Villa de Vigo, con la circunstancia de relevarla de todo servicio y derechos por esta gracia".

Ese Real Decreto se publicó el 27 de octubre de aquel año. Vigo ya ostentaba el título de Villa, según afirman los historiadores, desde mediados del siglo XV. A la nueva consideración de Ciudad Fiel, Leal y Valerosa se unió en 1898 y, por la actitud de los vigueses con los repatriados de la guerra de Cuba, el tratamiento de Siempre Benéfica que mantiene el escudo en la actualidad.

2. ¿A quién perseguían los franceses cuando llegaron a Galicia?

Antonio Giráldez, historiador y secretario del Instituto de Estudios Vigueses, describió en su reciente conferencia en el Club FARO, que el ejército de Gran Bretaña salió huyendo de la meseta hacia el norte de España mientras se les echó el viento encima. Llegaron a los montes gallegos buscando una salida por los puertos del Cantábrico para embarcarse hacia su país.

Napoleón Bonaparte había obligado a todos los países europeos a firmar el Decreto de Berlín, que prohibía la importación de bienes británicos a los países europeos aliados o dependientes de Francia, una directriz únicamente incumplida por Portugal.

Por este motivo, los ingleses ayudaron a Vigo en su victoria aquel 28 de marzo bombardeando desde dos fragatas, "Lively" y "Venus", situadas en la Ría de Vigo para amenazar las fortalezas de San Sebastián y el Castro, que estaban bajo la ocupación francesa.

3. Vigo fue la primera ciudad española en expulsar a los franceses.

El 28 de marzo de 1809, un alzamiento popular logró expulsar a los franceses y convirtió a Vigo en la primera localidad de Europa que logró expulsar al ejército de Napoléon de una plaza conquistada. Así lo corroboran los historiadores de la época.

Con el paso de los años, la Reconquista se ha convertido en una de las fiestas más queridas de los vigueses. Su celebración es todavía más multitudinaria desde que la rehabilitación del Casco Vello vigués devolvió el protagonismo al germen de la ciudad de Vigo.

4. ¿Por qué Portugal ayudó a los gallegos a expulsar a los franceses?

Giráldez recoge en su artículo "Luces y sombras en la intervención portuguesa durante la "reconquista" de Vigo", que publica en el último boletín del Instituto de Estudios Vigueses, que Napoleón no pretendía invadir Portugal con la ayuda de España, sino que buscaba ocupar la totalidad de la Penínsulas Ibérica con su ejército.

Los portugueses tuvieron claro esta intención desde el principio, por este motivo, cuando los franceses se asentaron en el sur de Galicia para cruzar a Portugal, el ejército luso acudió en ayuda de los gallegos y propició la estrategia de aprovechar que una parte de los franceses se había asentado en el norte de Galicia para esperar en la reserva y que otros marchaban hacia el sur para entrar desde Castilla en Portugal, para atacar a los asentados tanto en Vigo como en Tui.

Aquí aparece la figura del teniente Almeida, quien desobedeció a sus superiores y llegó hasta Vigo, donde, según sus propias memorias, fue clave en la expulsión de los franceses y la reconquista de la plaza viguesa. Aunque la versión de los historiadores no recoge que Almeida fuese tan decisivo como él dejó escrito.

5. La ofensiva de Vázquez Varela

El acalde de Vigo en 1809, Francisco Javier Vázquez Varela, propició el asedio de los franceses al dejarles sin acceso a los alimentos. Enfermos y hambrientos, los más de mil soldados que habitaban Vigo empezaban a desesperarse. Los generales se veían incapaces de conseguir comida para sus soldados y forraje.

Todo esto gracias a la resistencia que Vázquez Varela organizó en la sombra. Además de conseguir que más de trescientos hombres se organizaran en un ejército de resistencia vigués que fue, en gran parte, el que consiguió expulsar a los franceses de la plaza de Vigo.