Leiva prepara un fin de semana redondo en Galicia. Llega con todas las entradas vendidas para sus conciertos en el Auditorio Mar de Vigo, este sábado a las 22.00 horas, y un día antes en la sala Pelícano de A Coruña. "Galicia siempre ha sido una plaza importante para mí, donde tengo un público especial", asegura. Presentará "Monstruos" y avanza que en Vigo podrá haber alguna sorpresa.
El cantante madrileño es también el productor del último y esperado disco de Joaquín Sabina, "Lo niego todo", con quien también se sentó a escribir las canciones. "Me subiré con él al escenario, es lo lógico, coincidiremos en alguna ciudad y espero que él también se suba conmigo en uno de mis conciertos", cuenta.
-¿Cómo afronta esta parada gallega de su gira con "Monstruos"?
-Siempre con la ilusión de ir a Galicia que es una plaza importante para mí. Siempre me ha ido bien allí y tengo un público fiel que convierte las actuaciones en especiales. El hecho de que se hayan agotado las entradas para mí es el verdadero termómetro de un disco: si los tickets vuelan es que las canciones han volado.
-¿Cómo será esta gira y cuánto tiempo estarás en carretera?
-Hicimos la presentación en octubre y ahora volvemos a la carga hasta el 30 de diciembre. Iremos a México y Argentina también. El disco tiene un carácter muy de directo, está como diseñado para ser tocado en concierto y eso lo pone todo muy fácil. Las canciones están grabadas con una banda tocando en directo, por eso suenan súper libres y contundentes. De alguna manera todo está saliendo tan bien que me siento abrumado.
-Después de Pereza, ¿ha vuelto a encontrar una banda con la que está cómodo?
-El proyecto lleva mi nombre pero tengo más sensación de banda que nunca. Más de la que tenía cuando éramos Pereza. El 80% son mis músicos de toda la vida, mis amigos del barrio. Con Pereza la dimensión de todo era muy grande y con el primer disco en solitario tuvimos que volver a remar todos. Fue como un cable a tierra, volver a tocar para ganarte un lugar.
-¿Son las canciones de este disco como un punto de inflexión personal para ti?
-No soy consciente de que este disco represente un momento vital más importante que otros en mi vida. Pero el tercer disco parece que es un lugar donde te vas o donde te quedas. Precisamente sí que tenía más que contar a nivel interno. No hablo tanto de las relaciones y hablo más de mí y de mi lugar en el mundo. Probablemente sea el disco que más se parece a quien soy yo. Pero no estoy seguro de que sea en el que me exorcizo más.
-Escuchando el tema "Sincericidio" pareciera que decir 'te quiero' en estos tiempos es ser demasiado sincero.
-Hay a quien le cuesta más y a quien le cuesta menos, cada uno con sus bloqueos. Yo con mis bloqueos quizá es una afirmación que no me gusta regalarla, me parece muy importante decirla y más en una canción. Siempre la evitamos porque resulta blando y después de muchos años me salió decirlo en una canción. Me pareció tan claro que dije: "esto es como un suicidio de sinceridad". Pero el mensaje es más básico que todo eso, se trata de decir algo sin filtros.
-¿Cómo será el concierto en Vigo? ¿Tocará los clásicos?
-Hay que hacer un equilibrio entre lo que tú quieres tocar y lo que la gente espera que toques. Tocaré gran parte de "Monstruos", haré un repaso por "Diciembre" y "Pólvora" y también tres o cuatro canciones de Pereza. Estamos en un momento de forma muy bueno como banda y creo que va a ser un concierto bonito de ver. Lo normal cuando paso por Vigo es que se suba algún amigo al escenario.
-¿En qué otros proyectos está inmerso?
-Estoy componiendo la banda sonora de una película, "La llamada", que se basa en la obra de teatro de Javier Calvo y Javier Ambrossi, que lleva años funcionando muy bien. Estoy trabajando en la parte instrumental y también haré la canción de la película.
-¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar con Sabina?
-Inolvidable. Estar con Joaquín todos esos meses escribiendo los temas, diseñando el disco, también con Benjamín Prado, buceando entre sus versos... dibujando un cuadro a medias al final. Joaquín siempre sonó mucho en mi casa desde pequeño y es un referente para contar historias. Es un lujo para mí colaborar con él, me preocupé mucho de disfrutarlo y los dos estamos muy contentos con el resultado. Inevitablemente, hay un trocito de mí ahí y lo defiendo como si fuera mío, le tengo un apego brutal a este disco. Me ha dado muchas alegrías.