Óscar Sánchez Fernández (Vigo, 1982) es químico y se dedica a la docencia, pero además de la ciencia tiene otra pasión: la literatura. Ahora ha pasado de lector a escritor con "Codex Gigas" (Tandaia), una ópera prima que encierra dos grandes misterios. El primero es la trama de ficción: una serie de asesinatos macabros que tienen en jaque a la policía de Vigo y que sirven para presentar el segundo misterio, este histórico: el "Codex Gigas", también conocido como "Códice de Satanás" o "Biblia del Diablo", una joya bibliográfica del siglo XIII que, según la leyenda, es fruto de un pacto con Satán. Con estos ingredientes, Sánchez construye una historia policiaca que protagoniza la inspectora Elisabeth y que tiene a las calles de Vigo como escenario principal.

-¿Cuál es el germen de esta historia policiaca?

-La verdad es que fue la historia la que me encontró a mí. Hace dos años, un libro que estaba leyendo citaba el "Codex Gigas". Ese mismo día volví a escuchar ese nombre en un documental y otra vez, en la radio, pero siempre sin explicar qué era, y como soy una persona muy curiosa, empecé a indagar y su historia me atrapó. Viajé hasta la República Checa para ver el libro, que se exhibe en la biblioteca nacional, y durante el proceso de documentación empecé a pensar en la historia, aunque estuve a punto de desistir. Fue entonces cuando descubrí un personaje fascinante: Savonarola, un religioso italiano del siglo XV que fue capaz de acabar con el gobierno de los Médici y que después fue excomulgado y ejecutado, y que en la novela tiene tanta importancia como el propio códice.

-¿La novela "resuelve" la leyenda que rodea este códice y que dice que es obra del diablo?

-Desarrollo mi teoría particular sobre esto. El "Codex Gigas" es una obra impresionante: mide 92 centímetros de largo y unos 50 de ancho, con un grosor de 22 centímetros. Tiene más de 600 páginas y pesa 75 kilos. Muchos personajes históricos, entre ellos Napoleón, y se dice también que Hitler, intentaron conseguir esta obra, que en su época estaba considerada como la octava maravilla del mundo, sin éxito. Es increíble que haya llegado hasta nosotros porque incluso se salvó de un incendio. De hecho, las páginas anteriores y posteriores a la del retrato del diablo se quemaron...

-Quien ha visto el retrato asegura que es impresionante. ¿Lo es?

-Sí, por la calidad que tiene, por sus colores. Toda la obra es impresionante. Hace unos años, un estudio científico demostró que fue realizado a una mano y que para realizarlo una sola persona habría necesitado toda una vida.

-La leyenda, sin embargo, dice que se escribió en una noche...

-Se cree que el autor del códice fue un monje benedictino del monasterio de la actual República Checa, German el Recluso, condenado a morir emparedado. Para que le perdonaran la vida, se ofreció a escribir una obra monumental que honraría al monasterio, en una sola noche y al ver que no sería capaz, hizo un pacto con el diablo.

-Y en la novela, una serie de crímenes vuelve a poner este códice de actualidad...

-Sí, la inspectora Elisabeth se encuentra con una serie de crímenes macabros que la llevarán a una secta satánica. La trama se desarrolla en Vigo, un escenario maravilloso y único para ambientar una novela, por sus calles, por la ría..., aunque también se desplaza a otras ciudades como Florencia, Estocolmo y Roma.

-¿Y esta podría ser la primera novela de una saga protagonizada por la inspectora Elisabeth?

-Aunque estoy preparando otra novela histórica ambientada en Bouzas y que abarcará desde la Guerra de Cuba a la Guerra Civil, la inspectora Elisabeth tendrá continuidad en otras historias, sí.