La fotógrafa viguesa Carla Andrade exhibe en Madrid, dentro de la exposición "Expectativa y Memoria" -que alberga la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando hasta el 17 de abril- una amplia selección de fotografías de su serie "Marruecos". Organizada por la Fundación Ankaria, en colaboración con Iberdrola, la muestra reúne una selección de cien fotografías y varias videocreaciones que muestran los cambios experimentados en el país vecino a lo largo del último siglo.

La serie de paisajes encadenados que muestra Carla Andrade (Vigo, 1983) es uno de sus primeros trabajos y también uno de los más personales. Su realización se remonta a un viaje que hizo hace cinco años hasta una zona cercana a Marrakech para indagar cuestiones relacionadas con su pasado.

"Mi abuela y mi bisabuela nacieron en Marruecos y el país me interesa mucho por su cultura y su filosofía, aunque es un tema del que no se hablaba mucho en casa y ese misterio creó en mí una mayor atracción", explica la fotógrafa.

En sus imágenes, Andrade crea una relación sutil entre lo femenino y el paisaje, una naturaleza arcana que traduce en sugerentes fotografías en blanco y negro tomadas con una cámara analógica. La interpretación de estas instantáneas es intencionadamente abierta. "Me interesaba hablar de la mujer marroquí sin mostrarla; para mí hay una relación entre el paisaje y la mujer, que permanece como escondida, en segundo plano, misteriosa... He tratado de reflejarla a través de paisajes sencillos y sensuales", describe la creadora.

El comisario de la muestra, Sema D´Acosta, se puso en contacto con la viguesa para mostrar, por primera vez, esta serie. "Me hace especial ilusión participar en la colectiva porque este trabajo nunca lo había mostrado y porque admiro mucho a los otros fotógrafos de la muestra y al comisario", apunta Andrade, que en estos momentos busca financiación para un nuevo corto que quiere rodar en Val Miñor y prepara una exposición individual en una galería de Bilbao.

"La muestra propone una reflexión general sobre España y Marruecos, dos países afines pero al mismo tiempo extrañamente desconocidos, y plantea, a través de imágenes, una revisión profunda y detenida de las relaciones e intercambios que han mantenido desde principios del siglo XX hasta hoy", explica el comisario de la muestra, Sema D´Acosta. La muestra toma como punto de partida las fotografías de época de Nicolás Muller y Bartolomé Ros, para aproximarnos al norte de África durante la primera mitad del siglo pasado, y conecta con otras de creadores contemporáneos del siglo XXI.