"El supermercado es mi refugio. Por el precio de cualquier chorrada me proporciona un mundo diurno, calefactado y filtrado de 9.00 a 22.00 horas. Seguridad, atención permanente y un paisaje de colores donde yo, cliente habitual, siempre tengo la razón. El supermercado es un mundo feliz que ejerce sobre mí tan poderosa atracción como para dedicarle un conjunto de poemas". Así es como comienza el nuevo libro "Poema del supermercado" que el porriñés David Pérez Rego ha sacado a la luz este mes de abril. Supone su primera obra de poesía, pues hace una década publicó "Amor, cerveza, muerte", un conjunto de pequeños relatos, y desde su adolescencia "siempre escribía cosas pero nunca las he dado a conocer". Incluso hace unos meses creó un poemario para su hija que ahora tiene dos años y medio "con la intención de que cuando sea más mayor lo pueda leer". Lo mismo hará con el más pequeño de la casa, de cinco meses, "para el cual también comenzaré en breve a escribirle algo dedicado", confiesa David, graduado en Historia del Arte y que trabaja como bibliotecario en su localidad natal.

"El libro está hecho para que la gente lo lea, no busco recaudación aunque cierto es que me gustaría vivir de la escritura", señala el porriñés. Y es que se trata de un libro digital que puede ser descargado de manera gratuita, bien a través de La Casa del Libro o de su propia página web ( davidperezrego.com).

Desde su publicación, el pasado 6 de abril, ha registrado ya cerca de un millar de visualizaciones. "Siempre he observado, de manera curiosa, cómo hay gente que va al supermercado a diario y lo considera como una especie de refugio de su vida y de la sociedad, son personas peculiares". El libro está escrito en primera persona e incluye 29 poemas que describen el mundo de los supermercados visto por un cliente habitual, que más allá de los servicios de compra entiende este lugar como un refugio.

"Un mundo dichoso donde uno puede llegar a encontrar la felicidad, un sitio bonito, abierto, con música y donde los amigos son los otros usuarios del súper, son personas que a veces carecen de una vida social. El libro destila ironía y humor pero también reflexiones más sutiles tanto sobre el mundo del consumismo y el capitalismo, como de la vida de las personas solitarias en la sociedad".

La obra ha sido resultado de sus múltiples visitas al supermercado, "observaba situaciones y comportamiento y tomaba nota de todo ello en el móvil, luego llegaba a casa y escribía y reescribía?", declara David, que asegura haber tardo unos seis meses en concluir el libro.

El escritor se declara amante de la poesía y el relato corto, "no tengo paciencia para escribir novela", con todo confiesa que alguna vez sí ha empezado alguna "pero siempre las he dejado a medias". Además, cuenta con diversas publicaciones de investigación, bibliotecomanía y patrimonio.