Cada lunes por la mañana, Fernando Molares Posada comienza la semana comunicándose con el centro de atención a personas con diversidad funcional Juan María de Parada. Envía a la dirección un planning con los momentos libres que le dejan los turnos de policía local en el Concello de Nigrán para que organicen las salidas en bici de los usuarios. Lo hace desde hace poco más de un mes. Él es, por el momento, el único que maneja los dos triciclos tándem, la bicicleta acondicionada y la silla todoterreno monorrueda que el Ayuntamiento compró a finales de enero por 18.600 euros para convertirse en el único de Galicia que ofrece esta alternativa de ocio a los vecinos con discapacidad de forma gratuita.

Hasta ahora son 23 los "pasajeros" que hacen uso de este novedoso servicio. Todos están "encantados", según indica el coordinador del Juan María, Alberto González da Rosa. Pero Fernando asegura que el verdadero beneficiado de la actividad es él. "É impresionante a liberdade que lles proporcionan estes paseos. A sensación é impagable. Moitas veces, cando imos costa abaixo, senten o aire na cara, póñense en pé na bicicleta e abren os brazos cunha inmensa felicidade. A maioría nunca puideran montar en bici e disfrútano moitísimo", relata.

Son experiencias nuevas para todos ellos, pero casi también para el propio Fernando, que lleva poco más de un año como monitor de DisCamino, el proyecto que inició su colega de profesión en Vigo, el inspector Javier Pitillas, en 2009 para hacer realidad el sueño de personas con discapacidad y a través del que ya han peregrinado a Santiago 145 aventureros.

Se unió a Pitillas por vocación. "Coñeciámonos desde hai uns vinte anos por temas laborais. Cando Javier empezou con DisCamino eu traballaba en Cambados e xa levaba a cabo proxectos de seguridade con nenos e persoas con discapacidade, así que sempre me dicía que tiña que probar con estas bicis. Probei e o certo é que engancha", explica. No se refiere únicamente a los buenos momentos de las rutas, sino sobre todo "ás leccións de humildade que che da esta xente cada día co seu afán de superación abismal. Decátaste de que non es ninguén realmente ao seu lado".

Se buscan pilotos

Por eso anima a los vecinos a aprender a manejar estos vehículos para colaborar con la causa. Algunos padres de usuarios ya lo están haciendo para disfrutar del ocio con sus hijos, dado que las bicis adaptadas del Concello de Nigrán están a su disposición en el pabellón, y él mismo los entrena. "Hai que practicar porque son triciclos con 14 marchas, hai que deixar de pedalear para cambiar de velocidade... pero é unha oportunidade moi boa para as familias porque poucas poden acceder a estes vehículos porque son moi caros, chegan aos 6.000 ou 7.9000 euros cada un", comenta.