El agua que mana en los montes de Chandebrito, donde el 15 de octubre encontraron la muerte Angelina Otero y Maximina Iglesias, es ahora vida y memoria. Una fuente con una placa recuerda desde ayer a las vecinas que murieron en el terrible incendio que asoló la parroquia. Los vecinos organizaron un acto de evocación a la par que inauguraron un parque etnográfico en la parroquia.

Los familiares de las dos mujeres desaparecidas recibieron, además, sendos ramos de flores. También hubo palabras emotivas por parte del alcalde de Nigrán, Juan González, y del presidente de la Asociación de Vecinos y Comunidad de Montes, Víctor Vidal, para los familiares y las dos víctimas.

El lugar donde se ubica el parque etnográfico, con un molino restaurado y un lavadero de agua, está debajo del castro de Chandebrito, un lugar que se encontraba hasta hace poco descuidado. Con esta actuación, realizada por los vecinos con apoyo del Concello de Nigrán, se da vida a esta zona y se busca que sea un punto de encuentro en la parroquia.

Agradecimiento

Tanto en las palabras de Víctor Vidal como del alcalde, hubo recuerdo para las personas fallecidas pero también agradecimiento para todos los vecinos de Chandebrito "que evitaron que aquel 15 de octubre fuese una catástrofe de mayores dimensiones", en palabras de Juan González.

También quedó patente en el aire la idea de que "ahora toca levantarse del sufrimiento y mirar a delante".

La fiesta vecinal continuó hasta entrada la noche. Previamente los vecinos pusieron a moler el molino y el agua corrió al lavadero que habían usado tantas veces las dos mujeres desaparecidas en el incendio.

Maximina Iglesias y Angelina Otero, de 86 y 78 años respectivamente, perdieron la vida abrasadas en el interior de la furgoneta en la que habían sido evacuadas de la zona por la Policía Nacional el día 15 de octubre. Se desplazaban lejos de sus casas, seriamente amenazadas por el fuego, en el vehículo de otra residente, que sufrió quemaduras. Los vecinos están trabajando desde entonces para recuperar la zona debastada por el fuego de aquellos días.