La irrupción de "Masterchef" en la comarca ha levantado pasiones, pero también críticas. Pese a rendir homenaje a los héroes de los incendios de Nigrán, el grueso del programa se centrará en un banquete preparado por los concursantes en el parador baionés. La polémica quedaba servida en las redes sociales. Mientras miles de vecinos seguidores del reality de máxima audiencia esperan ávidos la emisión, muchos se han mostrado molestos porque Baiona y Gondomar se quedasen al margen pese a haber sufrido también el desastre del 15 de octubre.

El tema no se quedó en el mero chascarrillo de Facebook. El encargado de otorgarle trascendencia política fue el alcalde de Gondomar, que mostraba su indignación en su perfil oficial por no haber sido invitado como presidente de la Mancomunidade do Val Miñor.

La concejala de Cultura de Baiona, María Iglesias, también entraba en el debate ante la rumorología desatada sobre el rechazo del gobierno del que forma parte a participar en el espacio. Aseguraba que la productora había solicitado 30.000 euros inasumibles para el Concello y sugería que la Diputación había llegado a un acuerdo con la misma sin tener en cuenta finalmente a los demás concellos miñoranos. Fuentes del organismo provincial indicaron que los costes habían sido mucho menores sin aclarar el motivo de centrar la atención en Nigrán.