El Concello de Nigrán y Diputación de Pontevedra, en colaboración con la Comunidad de Montes de Camos, realizan obras de emergencia en un tramo de 150 metros en la carretera de Piñeiro ante lo reciente desprendimiento de tierra y rocas sobre esta calle e inundaciones en este barrio ante la abundancia de lluvia. La carretera, que une la parroquia de Camos con la de Chandebrito, discurre en una de sus márgenes a un lado del monte comunal calcinado en los incendios de 15 de octubre y, ante la ausencia de masa forestal en esta zona de pendiente inclinada, la acumulación de lluvia provoca torrentes y precipitaciones de tierra y rocas sobre la calzada y el barrio de Piñeiro. "Es una consecuencia directa del fuego, la erosión causada en el terreno hace que el agua baje sin freno alguno desde Chandebrito, ya que nos encontramos en una zona de gran pendiente. Era algo que nunca había sucedido y nos vemos en el deber de actuar de urgencia", resume el alcalde, Juan González. Las obras consisten en el retranqueo de un metro más en la margen de la carretera afectada, nueva canalización de pluviales, construcción de un talud con una inclinación mayor (tendrá una distancia de 10 metros sobre la margen más desfavorable de la calzada) e instalación de un muro de contención que impida los desprendimientos sobre la calzada, además de habilitar nuevos aliviaderos para evitar inundaciones. Por otra parte, se retirarán árboles y rocas del monte en una margen de seguridad de 10 metros sobre la carretera. "Se trata de una obra de carácter urgente en la que la respuesta de la Diputación tras la petición del Ayuntamiento fue inmediata", señala Diego García, edil de Urbanismo.