La Plataforma SOS Mosteiro de Oia registró un escrito en la Xunta de Galicia en el que exigen los informes periódicos sobre el estado del cenobio que maneja la Consellería de Cultura y que son realizados por técnicos.

"Queremos esos informes y saber si se han hecho y si recogen realmente el estado del cenobio en la actualidad, y si lo recogen queremos saber porque no se actúa", afirma un portavoz de la plataforma.

El escrito registrado este martes en la Xunta está avalado por 187 firmas y con él SOS Mosteiro pretende ser parte en las actuaciones de la Xunta, tener conocimiento de las inspecciones y en base a estos informes exigir la expropiación, rehabilitación y puesta a disposición de la ciudadanía.

La consellería había asegurado que sus técnicos realizan un control exhaustivo del monumento con visitas periódicas. Dijeron que han inspeccionado recientemente la iglesia y certificado la seguridad para los visitantes. El informe sobre el resto del edificio se encuentra en elaboración y la Xunta insiste en que exigirá al dueño que repare los daños. Asimismo, recalca que tomará las medidas necesarias para garantizar la salvaguarda del conjunto en colaboración con la propiedad y el Concello.

Los vecinos creen que hay que actuar de inmediato y no esperar a que el edificio se siga deteriorando. "Nosotros queremos que este Bien de interés Cultural (BIC) se expropie, se rehabilite y pueda ser visitado por los vecinos y visitantes libremente", indican. Añaden que creen que la actual propiedad no ha estado cumpliendo con las visitas obligadas como BIC, y que no existen facilidades para que se pueda ver el monasterio.

La propia consellería informó a Faro de Vigo que no existe constancia de que la propiedad, que proyecta un hotel de 72 habitaciones en el edificio, haya obviado su obligación mantenerlo como marca la Lei de Patrimonio de Galicia, la misma que contempla la expropiación de los BIC si existe un incumplimiento del deber de conservación por parte de sus dueños e incluso la justifica con el fin de ponerlos en valor para facilitar su disfrute por parte de la sociedad, y por lo tanto no existen razones para la expropiación de este monumento del siglo XII tal y como pide la plataforma.

Por otra parte, el Pleno municipal de Oia decidió en su última sesión apoyar la postura de la Plataforma de exigir la expropiación del bien con los votos de todos los grupos municipales.