Un total de 20.000 euros es lo que destinará el Concello de Porriño a la próxima edición del Festival de Cans, convirtiéndose así en "la mayor aportación municipal de la historia del certamen", según indican desde el gobierno local. Son 2.000 euros más que en 2016 y 2017 y 5.000 euros más que en 2015, aunque el pasado año el consistorio emitía un comunicado una vez finalizado el festival en el que ponderaba en más de 30.000 euros lo aportado al cuantificar servicios como la seguridad y la limpieza, entre otras labores.

La alcaldesa Eva García de la Torre y la concejala de Educación y de Seguridad, Lourdes Moure, se reunieron con el director del festival, Alfonso Pato, y con la presidenta de la Asociación Cultural Arela, Keka Iglesias, para trasladarles la noticia. La regidora subrayó "el compromiso del gobierno local y de todos los vecinos de Porriño, que hacen un importante esfuerzo, con el festival y con los vecinos de Cans, y de ahí que en el presupuesto de 2018, que está cerrado y se llevará a pleno, haya una partida presupuestaria nominativa para el festival". García de la Torre indicó que "el objetivo es garantizar un aporte económico vital para el festival, de modo que pueda seguir celebrándose cada año con mayor éxito y siga situando a Porriño en el mapa cultural dentro y fuera de Galicia".

No obstante, desde la organización del evento señalan que "las ayudas procedentes de los organismos públicos cubren, aproximadamente, una tercera parte del presupuesto, ascendiendo el último a unos 150.000 euros", teniendo que echar mano de recursos propios y de patrocinadores y colaboradores privados para llevar a cabo el festival de cine, que este año se celebrará del 23 al 28 de mayo.

Ahora están pendientes de que en los próximos meses salgan a concurso las ayudas que la Diputación de Pontevedra y la Axencia Galega das Industrias Culturais (Agadic) destinan a festivales de esta índole, cuyas subvenciones se rigen por concurrencia competitiva. Entre ambas entidades estiman sumar cerca de los 40.000 euros. La ayuda por parte del Ministerio de Cultura ya no la consiguieron la pasada edición y, en principio tampoco cuentan con ella este año, pero "no está nada cerrado".

A mayores de la aportación económica directa, el Concello seguirá colaborando además en materia de seguridad, limpieza, transporte, regulación del tráfico y montaje de palcos y escenarios. En este aspecto, Pato señala que el festival está creciendo "en seguridad y en logística", siendo este último "uno de los apartados que más consume y más complejo". Así, indica que "se precisa de una coordinación transversal, requiriendo la intervención de diversas concejalías, desde seguridad y tráfico, a vías y obras, educación y cultura".