La alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, se reafirma en que "las cuentas municipales vienen siendo positivas desde hace años" y sale así en respuesta a la acusación por parte del grupo municipal de GañaMos de confeccionar un presupuesto "irreal" para 2018.

El tema será uno de los puntos a tratar en el pleno ordinario convocado para mañana a las 10.00 horas, en el Pazo de Mos, pero desde su presentación a los medios de comunicación, la pasada semana, ha generado un cruce de acusaciones. Tras su aprobación mañana comenzará el plazo de exposición pública para que cualquier ciudadano pueda presentar las alegaciones que considere oportunas que serán luego estimadas o no. Con todo, el 1 de enero aún no podrá entrar en vigor, así lo manifiesta el BNG que cie que "no se prensenta en tiempo como dice la alcaldesa, ya que entrará en vigor, como mínimo, a finales del mes de enero".

Arévalo asegura que "la recaudación no está inflada ni maquillada ni lejos de la realidad" y que no existe un informe desfavorable de Intervención "sino una recomendación de ajustar los capítulos de ingresos y gastos a los padrones", lo que la alcaldesa argumenta en "un cálculo al alza referenciando la estimación de un aumento de la recaudación tributaria municipal motiva por la entrada en vigor del Plan Xeral", y pone de ejemplo el anuncio de la Ciudad Deportiva del Celta "y todo lo que esta instalación supondrá para Mos".

Por lo que respecta a pagos pendientes del año 2016, la regidora local certifica que "las únicas obligaciones que quedan pendientes ascienden a 77.935,26 euros -y no a más de un millón como sostiene GañaMos- y que están pendientes única y exclusivamente porque hay abierto un proceso judicial respecto a esas facturas y su pago no está autorizado". En este sentido, desde el BNG hacen mención a una deuda de 124.000 euros que tiene el Concello con la Mancomunidad, y que aseguran "no aparece", los nacionalistas aseguran además que este presupuesto "legaliza la productividad que arbitrariamente concede la Alcaldía a ciertos trabajadores, cambiando las bases de ejecución del presupuesto para poder llevarlas a cabo sin que la Intervención del Concello ponga reparos".

En cuanto a la existencia de un préstamo bancario, la alcaldesa recuerda a GañaMos que "ellos mismos votaron a favor", que "hubo que pedir por culpa de un error del Consorcio del Louro para poder realizar una importante obra de saneamiento en Tameiga".

Electoralismo

El BNG de Mos asegura que no apoyará el presupuesto de 2018 porque "no se fía del equipo de gobierno del PP, que infla los ingresos para cuadrar las cuentas". Además sostiene que el capítulo de inversiones "se dispara, algo que hace que podamos calificar de electoralismo en estado puro, ya que se trata del último año antes de las elecciones municipales".