La directiva de la Asociación de Afectados por la Ampliación de la AP-9 en Chapela se reunió ayer en Santiago con la conselleira de Infraestructuras y Vivenda, Ethel Vázquez, y con el alcalde redondelano, Javier Bas, y varios de sus concejales, para solicitar a Xunta y Concello que se mantengan vigilantes para garantizar el cumplimiento de los acuerdos de mejora alcanzados con Audasa en las parroquias de Chapela y Trasmañó.

El colectivo vecinal destacó la labor que llevan realizando desde hace años para exigir diversas mejoras, además de la reposición de bienes y servicios afectados, como contraprestación por el perjuicio que causará la ampliación de la autopista en las dos parroquias redondelanas, y consideraron que gracias al diálogo fluido y el apoyo del gobierno local, se consiguió acordar un plan de actuaciones que redundará en una reducción de las molestias que provoca este vial y en solucionar algunas reivindicaciones históricas de mejora de comunicaciones y servicios en Chapela y Trasmañó.

El alcalde redondelano desveló que en el pleno de mañana comparecerá, a petición del grupo del PP, para explicar con detalle el plan de mejoras acordado con Audasa y Fomento para esta zona en el que se incluye la reforma del puente de acceso a Trasmañó, la nueva calle de Pasán para unirla con la Estrada do Torreiro o la mejora de la subida a Mouriño o el nuevo colegio de Igrexa, entre otras.

Los vecinos y el alcalde también piden a la Xunta que gestione ante Fomento la gratuidad del tramo desde Vigo a Rande y la apertura de una salida en la zona de Torres de Padín.