El jardín botánico del castillo de Soutomaior acoge dos nuevas especies de árboles para completar las más de cien variedades que ofrecen las 25 hectáreas de superficie de la finca de la fortaleza, propiedad de la Diputación de Pontevedra.
En concreto se trata de un ejemplar de abeto de cinco metros de la familia Abies Pinsapo, que se colocó en el patio de armas del castillo, reponiendo así el que ya existía y que fue derribado por los temporales del pasado invierno. Esta especie aparece en varios puntos de las Sierras de Málaga y Cádiz, en el extremo occidental de la cordillera Bética. La mayor parte de los pinsapares andaluces se encuentran en áreas protegidas del Parque Natural de la Sierra de las Nieves y Paraje Natural de los Reales de Sierra Bermeja, en la provincia de Málaga, y Parque Natural Sierra de Grazalema, en la provincia de Cádiz. Tiene una especie similar conocida como Pinsapo Maroccana, localizada en el Norte de Marruecos con la cual inicialmente se confundía.
La otra especie que fue plantada es un cedro de la familia un Cedrus Atlantica Aurea, que se plantó en la parte baja del jardín y del que hasta ahora no existía en la finca ningún ejemplar. Es una especie de cedro que procede de Rusia, permanece todo el año verde y crece hasta los doce metros de altura con su porte cónico.
La superficie de 25 hectáreas del castillo de Soutomaior cuenta con un jardín de cien especies singulares y de camelias, pero además tiene una plantación de vides de uva albariña que se entregan la una bodega tras una subasta pública y árboles frutales que, tras la recogida, se destinan a entidades benéficas de la provincia.
