El gran despliegue en la rotonda entre Mos y O Porriño debido a un escape de gas que quedó en falsa alarma. La alerta saltaba a las 11.15 horas cuando los vecinos de rotonda justo en el límite de ambos municipios avisaban de un fuerte olor en la zona. Hasta el lugar se desplazaron inmediatamente personal de Gas Natural, los Bomberos del Baixo Miño y la Policía Local de ambos municipios para realizar mediciones y localizar el origen de la fuga.
Sin embargo, y tras dos horas y media de rastreo, ni los instrumentos de medición de los bomberos ni de los técnicos de la compañía eléctrica encontraron ninguna fisura ni poro en la línea de suministro. La principal hipótesis apunta ahora a un posible vertido en la zona que provocó un olor muy similar al del gas.
El dispositivo obligó a acordonar la zona y a cortar el tráfico en la calle Ramiranes y en la Avenida de Galicia sentido al casco urbano, mientras la N-550 y la N-120 se mantenían abiertas. Sobre las 13.45 horas se daba por finalizado el despliegue y se restableció la circulación.
Como parte del operativo de prevención fue necesario desalojar dos viviendas y un bajo donde de sitúa una administración de loterías. Sin embargo, no se registraron heridos ni incidentes.
