El presidente de la Comunidad de Montes de Ribadelouro (Tui), Miguel Rodríguez, denunció ante la Guardia Civil y el Servicio de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia la aparición de globos incendiarios en su parroquia.
Los artefactos fueron localizados hace dos semanas, y están realizados a la viaja usanza de globos de papel -el estilo de fabricación del famoso globo de Betanzos o los de San Miguel en Ponteareas- a excepción del aro, que está realizado de mimbre, y la cruz de la boca, que es de hilo. "De esta forma, una vez el globo cae en el monte, la mecha encendida que lleva prende fuego sin dejar rastro alguno", asegura.
Estos globos ascienden por el calor, tras dotarlos de una mecha encendida que suele contener un líquido para hacer retardar el fuego. Cuando la llama es mínima va perdiendo calor y cae, provocando el incendio. También prende fuego al quemarse la cruz de hilo que sujeta la mecha, desprendiéndose esta sobre la biomasa.
"En las condiciones climatológicas que teníamos hace dos semanas, artefactos de este tipo son mortíferos para el monte, porque con una pequeña chispa el incendio es seguro", señala.
Uno de los globos fue a caer en la finca privada de la vecina Rosalía Correa y cayó encendido. "Vimos que el gobo cayó cerca del monte encendido todavía y acudimos para apagarlo y recogerlo", apunta.
El presidente de la comunidad cree que este globo y otro localizado a unos 2 kilómetros provenían de la zona de Gondomar, aunque no puede asegurarlo con precisión. El monte de Ribadelouro limita con el Aloia, y según el presidente se encuentra bastante limpio y cuidado "ya que tenemos cinco operarios en el monte todo el año".
