Usuarios del transporte público de la comarca del Condado-Paradanta se reunieron en el Concello de Ponteareas con dirigentes municipales de la villa del Tea, y también de Mondariz, para trasladarles su preocupación ante "los recortes del nuevo servicio", con el objetivo de acordar las medidas a adoptar para reclamar la reposición de las líneas regulares de autobús. Al encuentro asistieron vecinos del casco urbano y de las asociaciones de vecinos de Santiago de Oliveira, San Lorenzo de Oliveira y Cumiar.
Exigirán a la Xunta de Galicia que mantenga los horarios y las frecuencias existentes hasta antes del pasado día 8 de agosto, fecha a partir de la cual se produjeron los cambios con la nueva adjudicación.
Desde el gobierno de Ponteareas se solicitará una reunión urgente con la Consellería de Infraestruturas e Vivenda para "exigir no solo la reposición del servicios, sino también para pedir explicaciones ante la falta de transparencia e información ofrecida tanto a los concellos como a los usuarios, quedando muchos de ellos olvidados en las paradas de autobús, sin saber que ese mismo día dejaba de existir esa línea o ese horario".
En este momento, dicen contabilizar más de una docena de líneas suprimidas en los trayectos lindantes con la Nacional 120, tanto en dirección Ourense como Vigo. En el caso de Mondariz, desde el gobierno aseguran que con el nuevo plan se eliminan 15 servicios, tachándolo de "unilateral y discriminador con el rural", y sostienen que la Xunta "incumple sistemáticamente los acuerdos de convocar las prometidas reuniones técnicas con los concellos para su participación en cada una de las líneas afectadas
Integración de viajeros
Los usuarios afectados aseguran que seguirán con la recogida de firmas y mostraron además especial preocupación por las condiciones del nuevo servicio de recogida escolar, del que dicen que tampoco disponen de información.
De manera que desconocen cómo se desarrollará la iniciativa anunciada hace unos meses de integrar, en el rural, el transporte regular con el escolar, aprovechando así las plazas vacías que queden en los autocares que trasladan los niños al colegio facilitando la movilidad de otros usuarios.
