El alcalde de Mondariz, Xoán Carlos Montes Bugarín, ha sometido el presupuesto, por segundo año consecutivo, a una cuestión de confianza. Tras ser rechazada la propuesta en el pleno ordinario del pasado sábado, se convocó una sesión extraordinaria el jueves en la que los grupos de la oposición confirmaron su negativa. Así, los cuatros votos del gobierno local (Alternativa por Mondariz) fueron insuficientes para aprobar la cuestión de confianza vinculada a las cuentas de este 2017, absteniéndose el BNG y votando en contra PP, MST y PSOE.

La edil socialista, Marina Alfaro, que el pasado año, ante la misma situación, se posicionara a favor al estar integrada en el grupo de gobierno, ahora acusa al alcalde de "actuar con premeditación, siguiendo su hoja de ruta, como en 2016, sin contar con la oposición para nada, incumpliendo sistemáticamente los compromisos plenarios en los que defendía claridad y transparencia".

Ante estas declaraciones, Montes Bugarín recuerda que la actuación llevada a cabo está contemplada en la ley y ante el rechazo de su propuesta "esta es la opción que nos queda, pues podíamos optar por prorrogar el presupuesto pero creemos que debemos elaborar un nuevo documento y, cuando menos, intentar aprobarlo. La oposición tiene que respetarlo, nuestra labor es gestionar para que los proveedores puedan cobrar". Otro de los argumentos en que se apoya la edil socialista es en el reconocimiento por parte del propio alcalde de que ya se haya gastado casi el 80% de lo que se recoge en el presupuesto, que este año asciende a casi 2,5 millones de euros. En este sentido, el regidor local admite que el presupuesto llega con retraso, y asegura que "cuando se les presentó el documento a los grupos de la oposición, a principios de julio, rehusaron hablar de ello, no recibiendo tampoco hasta ese momento propuesta alguna". En este sentido, desde el PSOE indican que "estábamos dispuestos a sentarnos con el gobierno dejando atrás diferencias, pero este hizo oídos sordos gestionando a su manera" refiriéndose, entre otras cuestiones, al más de medio millón de euros del Plan Concellos de la Diputación.

A partir de ahora comienza a contar el plazo de un mes para que la oposición presente una moción de censura. Bastaría el acuerdo de seis de los siete concejales que suman PP (3 ediles), BNG (2), MST (1) y PSOE (1), de lo contrario el presupuesto quedará aprobado de manera automática, como así se establece en la ley.

Optmización de servicios

El alcalde destaca del nuevo presupuesto la optimización de los servicios, sin que ello suponga una suba en la recaudación, "los vecinos no verán incrementados sus impuestos y, sin embargo, sí podrán disfrutar de una mejora de determinados servicios". En este sentido, para servicios sociales se destinarán 9.000 euros más y se creará una partida para igualdad. También se incrementará el montante en cultura y en la promoción del empleo, "que de los 1.500 euros del 2015 y los 3.000 euros en 2016, pasaremos ahora a los 10.000 euros que se invertirán en cursos de formación, porque creemos que este es un pilar básico y fundamental".

Otra de las actuaciones de importancia será la construcción de una depuradora ecológica, "para lo cual prevemos adquirir un terreno en Vilasobroso", además de trabajos de mantenimiento en la depuración de aguas, mejorando así todo lo referente al saneamiento en el municipio.

Todo estos incrementos se sufragarán gracias a una redistribución de partidas, además de un aumento en la recaudación de 66.000 euros. Además, otro punto importante que destaca Montes Bugarín es el ahorro en el servicio de recogida de basura, "que está suponiendo un déficit de 120.000 euros al año para las arcas municipales y que, gracias al Plan Revitaliza, estas pérdidas se reducirán en torno al 50%". Por su parte, desde la Diputación ya se ha concedido a Mondariz una subvención de más de 300.000 euros para implantar el compostaje antes de finales de 2018.